Los distribuidores agotan el contingente de 45.000 toneladas de Túnez

Enrique Alonso/Jaén
El aceite de oliva que se produce en Túnez, prácticamente, ya está en la Unión Europea. Los grandes distribuidores y comercializadores han tirado de esta reserva en las últimas semanas, lo que da un argumento más para entender la increíble bajada que ha experimentado el precio del zumo.

    13 mar 2009 / 11:05 H.

    La Organización Común de Mercado (OCM) de la Unión Europea es la que marca las reglas. Da ayudas a los oleicultores, pero, también, permite la entrada de caldo desde otros países que están fuera de la Zona Euro. Precisamente, Bruselas autoriza a los grandes envasadores y distribuidores europeos para que vayan a las cooperativas y almazaras de Túnez para adquirir aceite de oliva. Sin embargo, no se puede comprar  todo el que se desee, sino, como máximo, 45.000 toneladas, que son las que entran sin necesidad de tributar en los aranceles.
    Esta norma está aprobada para rebajar las tensiones en el precio, ya que los grandes distribuidores podían acudir a países de fuera de Europa para completar sus bodegas. No obstante, en la coyuntura actual no ayuda mucho a los olivareros andaluces, que soportan un precio ridículo. Una de las causas de la devaluación de la cotización que se ha producido en los últimas semanas obedece a que el mercado estaba muy complicado para salir a vender debido a que el contingente de Túnez entraba en Europa. Por ello, existía menos necesidad de comprar por parte de los comercializadores, por lo que, cuando se cerraban tratos en España, era a bajo precio. Según ha podido saber Diario JAEN, hasta el 31 de enero, las empresas de Europa habían adquirido 15.000 toneladas de zumo de aceituna. Por ello, la mayoría del caldo ya está aquí. Quizás falta alguno, pero muy poco. Comprar aceite en Túnez es más barato. El contingente de 45.000 toneladas es “apetitoso” para los comercializadores, pero, una vez acabado, salir a adquirir caldo de aceitunas fuera de la Unión Europea no interesa porque se ha de tributar en los aranceles. El valor del aceite de oliva cayó por debajo de los 2 euros el pasado 29 de noviembre. Desde esa fecha, se ha aproximado, pero nunca ha superado esta cantidad. Pese a que el mercado está raro y hay muchas empresas que se han negado a vender a esa cotización, el precio no ha dejado de caer. Ayer, el Poolred de la Fundación del Olivar decía que el valor medio de las operaciones a granel en las cooperativas y almazaras era de 1,78 euros por kilo. Es un precio de auténtica ruina para el olivarero y para la economía jiennense. Mientras, las contratos en el Mercado de Futuros también mostraban bajadas.