Llega la hora de recuperar

El incendio de Quesada, el más grave registrado en la provincia en lo que va de siglo, una auténtica catástrofe para el medio ambiente, todavía podía haber sido peor. Esa es la conclusión que se extrae después de la visita a la zona afectada del consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, José Fiscal, que valoró la eficaz actuación de los medios del Infoca, principales responsables de que las llamas no devoraran aún más superficie y acabaran por dañar, también, el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas, la mayor extensión verde protegida del país. La magnitud se entiende cuando se ponen encima de la mesa las cifras, al igual que al conocerse que se van a invertir más de dos millones de euros en la regeneración ambiental de la zona, en concreto, en los términos de Quesada, Huesa, Larva y Cabra de Santo Cristo. El consejero puntualizó que la mayor parte es superficie forestal, mientras que otra de unas trescientas hectáreas es agrícola.
Mientras, se avanza en las investigaciones para encontrar a los responsables de los incendios de Mágina, en Torres, y de La Puerta de Segura, después de que haya quedado demostrado que ambos son intencionados. Y que los culpables paguen por un daño tan gratuito, con los oscuros intereses que se puedan encontrar detrás de semejantes acciones. Quizá, si la ley fuese más severa, el efecto disuasorio haría su efecto en este tipo de hechos delictivos.
En la otra cara, hay que subrayar que, en medio de la catástrofe, aflora también la solidaridad, como es el caso de la empresa oleícola que va a destinar un porcentaje de sus ventas a las tareas para recuperar el espacio calcinado. Una prueba más de que el ser humano es capaz de cometer acciones en los polos más opuestos.

    25 jul 2015 / 08:46 H.