Leopoldo Abadía: 'Cuando el paro baje, la crisis habrá tocado fondo'

Faltaba media hora para que comenzara la ponencia y el Aula de Cultura de la Diputación Provincial ya estaba abarrotada de público. Había gente en las sillas, en pie y hasta sentada en el suelo gracias a la expectación que generó el ponente, que es popular gracias a sus obras sobre economía —pese a que es ingeniero y aseguró que sólo aprobó dos asignaturas cuando estudió esta disciplina— y a la televisión debido a las apariciones en Espejo Público o en Buenafuente. Además, se veían a muchos jóvenes.

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La redactora jefa de Diario JAEN, Juana González, fue la encargada de hacer la presentación. Hizo una precisa semblanza del ponente y resumió las ideas que recoge en sus textos. Luego, Leopoldo Abadía dividió su conferencia en dos partes bien diferenciadas. En la primera explicó por qué se ha llegado a esta situación económica. En la segunda indicó qué hacer para salir.
El conferenciante basó su discurso en la fina ironía. A una de las preguntas que está en boca de más españoles: “¿Cuándo saldremos de la crisis?”, dice que no tiene ni idea. Además, explicó que la mayoría de los expertos, analistas y ponentes tampoco. Sin embargo, matizó que se sabrá cuando toque fondo. Recalcó que ese momento se notará porque el paro comenzará a caer. “Se medirá cuando se vea que el desempleo baje, por lo menos, dos veces seguidas en la Encuesta de Población Activa”, declaró. El escritor y el profesor indicó que hay que ser optimista, pero sin ignorar la situación económica. Además, tampoco distraerse en el gasto y siempre hacerlo conforme a la situación de cada uno. “Un parado casi no puede gastar y un trabajador siempre con mucha cabeza y conforme a sus posibilidades”. No obstante, aseguró que se ha de ser prudente, pero no un “cobardica” porque tiene claro que hay gente que no consume “por si acaso”. Leopoldo Abadía aseveró que ha habido mucho “sin vergüenza” que se ha aprovechado de los demás, por lo que pidió volver a la decencia y siempre comprar lo que se entiende. Precisamente, declaró que muchos productos financieros se compraron sin conocerlos y ahora dan problemas.

“Los impuestos subirán aún más”
Leopoldo Abadía está convencido de que los impuestos subirán aún más. Explicó que es una de las salidas que tiene el Estado, ya que la otra —incrementar el endeudamiento— la calificó como una auténtica tragedia. Dijo que lo peor sería pedir aún más dinero porque se ha de devolver y con intereses.
“Primero empezaron a decir que a los poderosos. Luego, a los poderosillos. Después, a los que pasaban por la calle con cara de que podían ser poderosos y, al final, hasta al señor que duerme en el banco borracho de vino de cartón. Los impuestos subirán para todos. Al mendigo también, que se manifiesta en el IVA que paga por cada litro”, explicó. El conferenciante dijo que ni siquiera está clara la magnitud de la crisis, por lo que insistió en que los gobiernos deben de contener el gasto y no aumentar la deuda. Su explicación del comienzo de la crisis es bien sencilla. Radica en las hipotecas a los ninja, que son personas que están en camiseta de tirante, sin sueldo fijo ni avales para responder. En cambio, indicó que se daban, incluso, por encima del valor de la casa. “Un ninja compraba una casa de 70 millones. El banco le daba 100. Con el dinero ponía los muebles, se compraba un coche, marchaba de vacaciones y, además, invitaba a comer a otros ninjas, que le preguntaban cómo lo había hecho. Luego, hacían lo mismo”.

Leopoldo Abadía dijo que el sistema financiero pensó que estimular la economía era dar créditos a ninjas para casas de lujo. Aseguró que comenzó en Estados Unidos y que, cuando se acabó el dinero allí, se extendió por el mundo aprovechando la globalización. Luego, el negocio inmobiliario se hunde y los ninjas van al banco y dejan las llaves de su casa —la hipoteca no es personal en EE UU, sino que pesa sobre el inmueble—, por lo que crean productos financieros basura para mantener la estructura, que pasan los controles de riesgos financieros. Así, empieza a extenderse por el mundo. El Euribor sube porque hay miedo a comprar “basura”. La gente se asusta y no gasta. Y, así, cae el consumo y se genera una tremenda deuda.

Leopoldo Abadía contestó a las cuantiosas preguntas que le demandó un auditorio ávido de conocer más sobre la actual situación económica y de compartir sus reflexiones sobre la coyuntura que atraviesa España. La última parte de la conferencia se convirtió en un diálogo en el que el invitado dejó claros los principios de los que parte:

Preguntas de los asistentes

Norberto Alférez
¿Tanta estructura de Estado y tantos organismos no son suficientes para velar  por la honestidad  de los gestores?
“Por lo que parece, no. De hecho, todo apunta a que se mete bastante la mano en la caja. La situación actual no se arregla con un cambio de estructura. Si se es un sinvergüenza, no es por el sistema. El que tiene ese instinto lo desarrolla en cualquier entorno. Creo que la crisis es de las personas, de la falta de decencia. Han fallado muchas cosas, pero al sinvergüenza no se le puede vigilar, ya que, antes o después, lo hace. Durante mi trayectoria como profesor, enseñábamos a los alumnos a ser eficaces, pero dentro de un orden. Eficacia y decencia es un modelo mucho más difícil y sofisticado. Por lo tanto, el cambio debe surgir de todos”. 
Pedro Sánchez
¿Cree que el fontanero que cobra una prestación por desempleo y hace chapuzas en negro piensa en ser decente?
“El otro día me mostraron un vídeo de una cola del INEM en la que había mucha gente. Mi primera idea fue que, si a alguno de los que había allí, se le ocurría un negocio y contratar a otro u otros dos, la situación mejoraría mucho. En España hay mucha economía sumergida, pero bendita chapuza. Sólo le deseo a ese hipotético trabajador que tire para adelante. Que se creen empresas, aunque sea en negro, al principio”.
Enrique Escobedo
¿Tiene una opinión de la implantación del Plan Bolonia en la Universidad?
“No conozco el texto en toda su extensión y por tanto no puedo dar una opinión. Sin embargo, sí le puedo decir que me molestan las manifestaciones de tantos jóvenes que salen a la calle a protestar y que creo que están igual que yo”.
Natividad Ramírez
Si las calificaciones de riesgo fallaron, ¿por qué siguen como referencia obligada para el sistema?
“Pues no lo sé. Pero es verdad. Mandan demasiado en el sistema financiero, pese a que han demostrado sus grandes errores. Lo mejores saber siempre lo que compramos para no caer, luego, en problemas. La mejor prueba está en que, antes de comprar un producto, hay que entenderlo, que tu mujer también lo entienda, tus hijos y hasta la abuela. Luego, para pedir cuentas del dinero se ha de preguntar: ¿Cuánto había?, ¿cuánto queda? y ¿dónde está el resto? Y no vale que en un fondo de inversión de no sé dónde”.
María Jesús Martín
¿Cómo podemos hacer una revolución diaria para salir de esta crisis económica?
“El secreto está en hacernos mayores. No podemos tragarnos lo que nos diga cualquiera. El sensato nunca comulga con ruedas de molino. Cuando una persona vaya a una entidad financiera y le digan que le venden un fondo variable garantizado siempre que hay preguntarle: “¿Garantizado por quién?. Hemos vivido con muchas personas que se han aprovechado de la situación. Cuando te cuentan una milonga, siempre es bueno decir qué dice usted para evitar luego problemas con el dinero, que se suele perder”.

El show de Leopoldo Abadía, del Blog Palabra perdida