Leones con piel de cordero

So pretexto del no abono de las tasas para la organización del acto, este abogado abertzale consiguió publicidad extra. Un error, porque así se pone mástil a la bandera del victimismo. Su discurso en el Congreso contra las consignas mercantilistas de Europa, los recortes del Estado y su defensa de la clase trabajadora le han granjeado simpatías de la izquierda de la izquierda fuera del País Vasco. En su tierra pone voz al independentismo ante una “España rancia” en una democracia que califica de “Régimen” y con una “historia de sangre y opresión”. Reduccionismo nacionalista que necesita del enfrentamiento y del “enemigo” para mostrar todas sus “cualidades”. Madrid, en este sentido, es el diablo y huele a azufre, la capital donde se concentran todos los defectos del Estado según los nacionalistas, tal y como describe Muñoz Molina en “Todo lo que era sólido”. Cuadra aboga no por una segunda Transición, sino directamente por una ruptura total y su postura democrática; sin embargo, parte del desprecio a quienes defienden otras vías. Subraya el valor de que su grupo, Amaiur, sea el quinto en el Congreso, pero ningunea la calidad democrática de quienes lo preceden. Y lo que denomina como “conflicto armado” es la guinda a su pastel ideológico. La recaudación del libro, como él ha explicado, irá destinada para una asociación de expresos vascos. Es su elección. No dudo de que en manos de los que apuestan por la vía política está conseguir la paz definitiva, pero tampoco olvido a todos los que siempre dieron cobertura política, argumento y justificación a los atentados de ETA. Pensar en las víctimas, es otra elección, la mía. Ellos también son leones, pero con piel de cordero “democrática”.
En Twitter: @JMSerranoAlba