Lección de protocolo para cofrades
Antonio Guillén Rodríguez, jefe de protocolo del Ayuntamiento de San Fernando, reunió en el salón principal del Palacio Don Luis de la Cueva de Úbeda a unas setenta personas, ciudadanos que asistieron a una ponencia que puso negro sobre blanco los aspectos formales del protocolo aplicado a las hermandades de Pasión.

El conferenciante hizo un repaso sobre el porqué de estas reglas que rigen el día a día de los actos públicos desde su óptica, como uno de los encargados de organizar, entre otras cuestiones, la conmemoración del Bicentenario de La Pepa. A su altura profesional, como rememoró el presidente de las hermandades ubetenses, José Antonio López Agulló, hay que añadir, como destacó, “su sentimiento de cofrade”. No en vano, es miembro, como recordó, de la cofradía sevillana de la patrona ubetense, la Virgen de Guadalupe, “La Chiquitilla”, como la llamó. Su charla estuvo salpicada de anécdotas, como la reciente relacionada con la visita de Sus Majestades los Reyes al municipio gaditano donde trabaja. Y es que, con cada palabra dejó claro con qué se gana la vida y cual profesor, dejó boquiabiertos a los aplicados alumnos. El protocolo viene de costumbre y ceremonial, como dice el diccionario, se refiere a la organización de ceremonias.
A esta definición, venida de la RAE, a la suya: “El protocolo debe de ser entendido como un instrumento al servicio de la sociedad”. Con ello, según una reflexión que plasmará en la tesis en la que trabaja, se define la presidencia, la precedencia, los símbolos, las intervenciones y los comportamientos. El protocolo, ejemplificó, es un “buen caramelo” y el ceremonial, “el papel con el que se envuelve”, en suma, dar imagen fiel de las personalidades que lo protagonizan y del mensaje que se quiere transmitir. Ya, hablando directamente a las cofradías, les dejó clara la necesidad de contar con un reglamento de protocolo. “No es lo mismo un acto con alfombra que sin alfombra”, resumió Rodríguez, que aclaró que la organización de acontecimientos sociales es una “forma de arte” y, como tal, “siempre hay una ceremonia en la que nos podemos inspirar”. Para fijar la atención de los presentes, recurrió a una proyección de diapositivas en las que descubrió en qué consiste una presidencia a la francesa, a la inglesa y hasta a la italiana y para qué sirve un “doble espejo” en una reunión de ministros de asuntos exteriores o de algo tan básico como una boda, que da pie a cambios, como el de los novios, en el centro del salón y mezclados con los invitados, en lugar de la tradicional “mesa escaparate”.
Ya en el plano más práctico, llegó a organizar un acto modelo, válido para cualquier cofradía. Comenzó desde el principio, desde “su majestad la invitación” a la necesidad de que cualquier acción con público no puede ser ni cicatera ni derrochadora. La ponencia fue posible gracias a la colaboración de Diario JAEN, Diez TV y la Unión de Cofradías. Esta propuesta, a medio camino de lo cultural, lo religioso y lo propio de una ciudad tan semanasantera como Úbeda, es fruto de la buena sintonía entre el periódico y las hermandades ubetenses. El compromiso lo resumió el director general de DIARIO JAEN, S. A., Tomás Roldán, con la frase: “Qué mejor lugar para continuar con la experiencia que ya pusimos en marcha en Jaén, con la Agrupación de Cofradías”. Esta idea, de servicio público del medio, la remarcó con la reflexión: “La cabecera nos da prestigio y una responsabilidad”. La periodista María Teresa Ortiz, que representó a Diez TV, destacó la oportunidad de una ponencia como la de ayer en una ciudad, dijo, en la que las cofradías cuidan cada día más la liturgia y el protocolo. El presidente de las hermandades, además de elogiar al conferenciante, agradeció a JAEN y a Diez TV su respaldo. José Rodríguez Cámara / Úbeda