Las obras en el Hípico dejan al "Jesús y María" sin escuela estival
Con la experiencia de las obras de La Alameda, los padres del colegio Jesús y María se ven, de nuevo, entre dos noticias: la buena y la mala. Si en el caso de los trabajos del parque colindante al centro, la mala noticia eran las molestias que implican toda obra, en esta ocasión, lo negativo es que los niños no podrán acudir a la escuela de verano. Sin embargo, así como la cara positiva de la intervención en el parque era la rehabilitación final y la renovación de la zona, la buena nueva está en que el centro escolar contará con un nuevo módulo.

Así lo explicó la presidenta de la ampa, María José Martínez, quien adelanta que no habrá escuela de verano porque la Junta de Andalucía arreglará los patios y un edificio. “Se trata de un módulo de la parte nueva del centro, que tiene unas grietas a consecuencia de las obras del aparcamiento del Hípico”, manifiesta la progenitora, quien matiza que la decisión que han tomado los expertos es derrumbar el módulo el completo para construirlo de nuevo. “Aun no es oficial, pero ya nos han informado sobre estos trabajos”, afirma Martínez.
Con una sensación agridulce por las previsiones para el verano, la representante de la ampa, manifiesta: “En principio, estamos contentos por el arreglo del centro, pero también lamentamos que no haya escuela de verano”, expresa.
la alameda. A punto de finalizar el curso escolar y tras una edición difícil para la comunidad educativa del “Jesús y María”, la presidenta de la ampa recuerda la experiencia vivida por las obras de La Alameda. “Lo pasamos mal una temporada”, afirma Martínez, en referencia a la falta de adecuación de los accesos al colegio. En este sentido, reconoce que, en algún momento, el colectivo y la dirección se llegaron a ver desbordados por la cantidad de quejas que les llegaban de los padres y la ausencia de escucha por parte del Gobierno municipal. “No nos hacían caso en el Ayuntamiento. Por eso tuvimos que recurrir a varias medidas de presión para forzar que atendieran nuestras reivindicaciones”, cuenta. Y es que una de las principales preocupaciones de los padres fue la falta de seguridad ante la salida de emergencia en el caso de incendio, debido a la obstrucción de la puerta lateral, cuyo paso estuvo cortado por la valla de las obras La Alameda.
Unas semanas después de que los trabajos en el parque arrancaran y con los nervios más calmados, la presidenta valora la evolución actual de los trabajos. “Vemos que van bien, a buen ritmo. Por la puerta de entrada del colegio se ha visto prosperar mucho y esperamos que, para septiembre, esté todo cambiado”, agrega Martínez, quien avanza que, para la semana que viene, volverán a cortar el acceso al portón principal, ya que los trabajadores empezarán a embaldosar la zona. Precisamente, gracias a la insistencia de los padres y de los comerciantes los responsables de las obras abrieron el acceso entre la Puerta del Ángel y la calle Agustina de Aragón.