Las nuevas obras de Martínez Molina eliminarán los adoquines por 567.000 euros

Javier Esturillo/Jaén
El Ayuntamiento de Jaén concluyó, ayer, la tramitación municipal del proyecto de adecuación de la calle Martínez Molina. La mesa de contratación adjudicó las obras por un importe de 560.000 euros y un plazo de ejecución de dos meses, según informa la Gerencia de Urbanismo.  A la tercera va la vencida. Con este lema, el Ayuntamiento se pondrá manos a la obra en una de las calles que más problemas ha dado en los últimos años como consecuencia de los errores cometidos en las dos primeras intervenciones.

    20 may 2009 / 10:38 H.

    Los adoquines, como ya anunció Urbanismo, serán sustituidos por asfalto impreso, al igual que se ha hecho en la calle Santo Domingo y está previsto hacer en Magdalena Baja y en Puerta del Ángel, con la idea de que la entrada al casco antiguo presente una imagen uniforme. Los vecinos y comerciantes de la zona estarán informados, en cada momento, del desarrollo de los trabajos. El concejal de Urbanismo, Manuel López, se reunirá con ellos antes del comienzo de la intervención y durante su desarrollo. “Queremos ir de la mano de los vecinos y comerciantes, porque somos conscientes de la importancia de las obras”, manifestó no sin antes advertir: “El Partido Popular nos enseñó cómo no se deben hacer las cosas. No queremos comunicarnos con los residentes a través de los juzgados”. La inversión total del arreglo de Martínez Molina, cuya primera intervención se pagó con los fondos europeos del Plan Urban, superará, con creces, el millón y medio de euros, casi tres veces más que la remodelación de la calle Berbabé Soriano. El asfalto impreso no es la única novedad del proyecto. El Ayuntamiento sustituirá todos los contenedores soterrados que estén en mal estado o no funcionen e instalará mobiliario urbano en aquellos puntos de la calle donde no haya. Se trata, en definitiva, de una nueva reforma integral de Martínez Molina, la tercera que sufre desde que el anterior equipo de Gobierno decidió “tocar” la zona.  Para los vecinos, las cosas se hicieron mal desde el principio y así se lo hicieron saber a las autoridades municipales a través de movilizaciones y protestas.