Las nóminas de diciembre ponen 'en jaque' a los ayuntamientos

No corren buenos tiempos para los concejales de Hacienda y Personal de los equipos de Gobierno de los municipios jiennenses. Para la mayoría —por dejar margen para alguna excepción de ayuntamiento desahogado, aunque parece que no existe— resulta un auténtico suplicio encontrar dinero para hacer frente a los sueldos de sus trabajadores. Sin embargo, hay dos meses críticos. Uno es junio, del que ya solo les queda el recuerdo. El otro viene ahora. Hoy es 30 de noviembre y seguro que muchos aún hacen cuentas porque deben de afrontar la mensualidad de diciembre. De hecho, el dinero estará ingresado en breve. Se trata de una de las nóminas más complicadas porque llega a final de año y, además, porque —con la de junio— es la más sustanciosa.
Un buen ejemplo está en el Ayuntamiento de la capital, que tiene a muchos de sus trabajadores con la incertidumbre de si cobrarán o no. Por el momento, el dinero ha llegado, pero las palabras del alcalde, José Enrique Fernández de Moya, en el pasado pleno —28 de noviembre— seguro que han generado angustia en muchos. “Las arcas municipales están en bancarrota”, dijo. De ahí que no hay duda de que resultará complicado encontrar los 5,8 millones de euros que hacen falta para pagar a sus trabajadores la mensualidad de diciembre, la paga extra y los seguros sociales. Todo apunta que se hará a través de un crédito, que ahora se negocia con una entidad financiera. El equipo de Gobierno asegura que pagar a su plantilla se ha convertido en un auténtico problema cada mes. Por ello, recalca que diciembre representa una doble preocupación.  Las arcas municipales tienen que afrontar el pago de 3,2 millones de euros durante 10 mensualidades al año —es el importe de la nómina normal y de las aportaciones a la Seguridad Social que marca la ley—, lo que implica 32 millones al año. Además, hay que sumar los pagos de junio y diciembre, que cuestan 5,8 millones cada una. Por ello, implica alrededor de 43,6 cada ejercicio. Asimismo, los ayuntamientos tienen que lidiar con otros problemas añadidos, como la bajada que han sufrido en sus ingresos. El Gobierno de España recauda menos dinero por impuestos —de los que ellos cogen parte—, lo que conlleva una reducción de las transferencias. Además, el “pinchazo” de la “burbuja” inmobiliaria ha hecho mucho daño a las administraciones municipales. Ya no reciben tantos euros por permisos y licencias para construir y, además, el urbanismo ha dejado de ser un lugar recurrente cuando había apuros. Antes, los terrenos se “rifaban” al mejor postor cuando no existía el dinero. Ahora, casi nadie los quiere porque no se construye. Sin embargo, no representa el único problema para los municipios, que también ven dificultades para acceder al crédito, simplemente, porque buena parte de las entidades financieras no se fían y temen que no les paguen o que tarden demasiado —con constantes intentos para refinanciar la deuda—. Por ello, muchos se han acogido a la línea de préstamos ICO que ha puesto en marcha el Gobierno de España como auténtica “agua de mayo”. Por otro lado, el Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, ya cuenta con un listado de alcaldes morosos. La sindicalista de la Federación de Servicios Públicos de UGT Remedios Cárdenas se ha encargado de elaborar el documento y explica que se personaliza en ellos el impago de nóminas a los trabajadores por parte de un municipio.
Los alcaldes Crispín Colmenero —Jamilena—, Sergio Rodríguez —Orcera—, Lourdes Chica —Campillo de Arenas— y Antonio González —La Puerta de Segura— están entre los regidores morosos de Andalucía. Según UGT, en el momento del estudio, acumulaban, como mínimo, el impago de una nómina a sus trabajadores, que es el requisito para entrar en la lista. El sindicato ha pedido a José Chamizo que medie con otras administraciones para lograr paliar la asfixia municipal y que se pague a los trabajadores con fórmulas que eviten opciones traumáticas, como los despidos.