Las arcas municipales pagarán liberaciones a veintidós ediles
Dice el refrán que quien hace la Ley, hace la trampa. Y, en la espinosa negociación sobre las liberaciones de concejales con cargos a las arcas municipales, la propuesta que ayer salió adelante con los votos a favor del PP y del PSOE y el rechazo de Ciudadanos (C’s) y Jaén en Común (JeC) demuestra que hasta la norma más rígida ofrece grietas que permiten su maleabilidad.
Por volumen de población, el “tope” de liberaciones en el Ayuntamiento está fijado en 18 exclusivas. Pero no impone limitaciones para las parciales, por lo que, incumpliendo criterios de proporcionalidad, 22 concejales percibirán un sueldo público con cargo a las maltrechas arcas municipales.
Con 12 ediles, el PP dispone de 10 liberaciones exclusivas; el PSOE combina 3 íntegras con 4 parciales; JeC tiene 2 exclusivas, y C’s, 3 parciales —2 de ellas al 67% y una al 66%—. Para mantener la “coherencia” mostrada en las reuniones, la portavoz de C’s, Salud Anguita, expresó el rechazo de su grupo a un reparto al que se han resistido hasta el último momento, intentando conseguir 3 liberaciones parciales al 75%. Sin embargo, el momento más tenso del debate de liberaciones lo protagonizó el portavoz de JeC, Manuel Montejo, cuando defendió una enmienda de adición a la propuesta de Alcaldía para recortar “en un 33%” los salarios de los concejales —un liberado al 100% percibe 44.000 euros brutos al año—. “La congelación de las retribuciones [de los ediles] es una incoherencia respecto a la austeridad de la que se hace gala”, argumentó Montejo. Sus palabras encendieron al equipo de Gobierno y al resto de la oposición. “Hemos echado muchas horas y encontrarme ahora con una enmienda diferente de cara a las cámaras de Onda Jaén no me parece adecuado”, le espetó el socialista Manuel Fernández Palomino.
Un reproche que también compartió la portavoz del equipo de Gobierno, Reyes Chamorro: “Da la sensación de que JeC son los que están más cerca de la situación real de la gente y que el resto de grupos estamos al margen y todos sufrimos ante la situación adversa que viven las familias”. Montejo se defendió señalando que esta medida ya la habían lanzado antes públicamente y que, si no se debatió en las reuniones, fue porque se trabajaba en un consenso que no se había alcanzado. De hecho, apuntó que no tuvieron la propuesta de organización definitiva hasta el martes por la tarde. Sin embargo, recuperando esa vieja costumbre que tantas críticas le ha valido por copar la palabra en los plenos y cerrar cada punto, el alcalde, José Enrique Fernández de Moya, le recordó que la propuesta definitiva obtuvo un “amplísimo respaldo entre los 4 grupos municipales”. “Y usted —personalizó— la ha modificado antes del pleno: venía con 2 liberaciones parciales y la ha reconvertido a una exclusiva”.