Lamentable, pero cierto

María Dolores García Escabias / Desde Villanueva de la Reina. Contesto al escrito de fecha 27/03/2012, en la sección Carta de los Lectores de Diario JAEN, con el nombre de dignidad institucional, remitido por Idelfonso Cobo López. En ella este señor viene a exponer la poca comunicación del alcalde de Villanueva de la Reina, hacia su persona, ya que hasta en 15 ocasiones se había dirigido, mediante carta, al señor alcalde y todavía no había recibido respuesta. Además, en dicho artículo hacia también un análisis sobre la incompetencia del regidor, algo que consideraba inigualable desde el franquismo hasta nuestros días, y que esa falta de comunicación evidenciaba la actitud despreciativa que tiene el mandatario.

    06 jun 2012 / 10:26 H.

    Señalar, en primer lugar, que gracias a la carta he conocido al autor, y coincido en todo su contenido; y, además, puedo dar fe de que es así, es decir, de esa falta de comunicación que señala. En segundo lugar, decirle que no desista y siga escribiéndole. Yo lo hago así, y posiblemente al cabo de los años el alcalde le diga: “Eso no tiene importancia, eso ya lo he repetido, yo cumplo la ley, se contesta a todo el mundo” ya verá como acierto en todo lo dicho. A mí tampoco me contesta, así como tampoco lleva a pleno mis mociones, ni preguntas, ni ruegos, etcétera. Solo recibo la mismas absurdeces por respuestas, es lamentable, pero cierto. La incompetencia no es lo único, ni lo peor; faltar a la verdad es más peligroso todavía, al tergiversarla con el objetivo de echarle la culpa a los demás. Coincidirá conmigo en que todo el mundo debe de tener algo bueno, aunque lo de este señor no es la comunicación, ni la sinceridad, ni la humildad e integridad exigible a todo dirigente que se debe a sus ciudadanos, ya que utiliza dos varas de medir. Quizás solo busque la fotografía donde le gusta aparecer y así no tiene que dar explicaciones. Por último, desearía comunicarle a este señor que cuando venga al municipio no se le ocurra asistir a un pleno ordinario con un teléfono móvil, ya que el alcalde ha resuelto prohibir el uso de teléfonos móviles, u otros aparatos para grabar, incluso apagados; ya que puede ser objeto de la inmediata expulsión de la sala. Eso sí, aunque a él le suene el móvil, no le afecta su antidemocrática resolución. Solo con la adopción de esta medida, se puede ver e intuir su talante democrático, al atentar contra el derecho a la información de los ciudadanos. Y concluyo diciendo que es incomprensible que en un estado democrático todavía se produzcan estas situaciones de falta de información y que se produzcan solo con quien quiera el alcalde. Es lamentable, pero todo está dirigido y condicionado a dar a conocer solo lo que se quiere; aunque ya algunos ciudadanos, como este señor, van conociendo su manera de actuar.