'Lactarius' expone una muestra con más de un centenar de setas y plantas

Esa era la primera imagen tras el acceso a la sala Miguel Castillejo de CajaSur. Entró un hombre y preguntó “de qué iba el asunto”. Lo hizo desde la puerta, con la cabeza asomada. La respuesta se la dieron dos hombres: Juan de Dios Reyes y José Llavero, presidente y secretario, respectivamente, de la Asociación Micológica Lactarius. Una muestra con más de cien especies esperaba a todo el que entrara al recinto de CajaSur. Fue la particular tarta de “setas” por el primer cuarto de siglo que cumplió el colectivo jiennense. El ir y venir de un número considerable de personas por la exposición, que contaba de imágenes explicativas y fotografías, daba cuenta de que el mundo de la micología interesa en el mar de olivos.
Felipe Jiménez, presidente honorario de la Asociación Micológica Lactarius, era el encargado de la visita guiada. El público descubrió, colocadas en hilera, especies con nombres no precisamente convencionales como, por ejemplo, “Cantharellus cibarius”. “La diversidad micológica en Jaén es notable”, expresó Juan de Dios Reyes. Mostró su satisfacción por el respaldo a la cita, pese a que el año meteorológico no ha sido bueno —“porque apenas ha llovido”—. Y confirmó que las setas gustan cada vez más en la provincia. “Hay aficionados de la Sierra de Segura que incluso organizan sus propias jornadas”, dijo.
José Llavero, que no paró de saludar a conocidos que se sumaron a la muestra, resaltó que el herbario de Jaén sobrepasa las mil quinientas especies. “Nuestra variedad micológica y gastronómica es notable. No tenemos nada que envidiar a otras zonas”, subrayó. Llavero admitió que la pregunta por excelencia que hace la gente en actos como el de ayer está directamente relacionada con el estómago: ¿Se puede comer?
Fran Cano /Jaén
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