La UPA cifra en 40 millones de kilos la cosecha oleícola local

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) calcula que la cosecha de aceituna rondará los cuarenta millones de kilos en el término municipal de Alcalá la Real, una cantidad que supone menos del volumen total recolectado en la pasada campaña. Así lo explicó el delegado local de la organización, Cristóbal Cano, quien precisó que la cifra final dependerá, en buena medida, de la situación meteorológica en los próximos meses. Si las precipitaciones son bajas y hace frío, la merma puede ser mayor.

28 sep 2014 / 09:19 H.


Por otro lado, Cano alertó acerca de la reducción en las subvenciones de la Unión Europea que notará la mayor parte de los productores de la zona. En esta línea, el secretario regional y provincial de la UPA, Agustín Rodríguez, anunció que luchará por conseguir que las explotaciones en pendiente o de baja producción cuenten con ayudas asociadas. Recalcó que el olivar es un cultivo muy importante porque fija la población al medio rural.
Las declaraciones de los dirigentes se produjeron durante la                    reunión anual de la UPA, celebrada en un establecimiento hostelero, que reunió a miembros y simpatizantes del colectivo. Agustín Rodríguez también avisó de que la campaña será “muy baja”, lo que se traducirá en una menor disponibilidad de aceite. La escasez de la cosecha no se compensará, a juicio de Rodríguez, con el alza en los precios. No obstante, admitió que en la zona de Alcalá la Real, al ser más tardía, perjudicaron menos las elevadas temperaturas durante la floración. El máximo responsable de la UPA en Andalucía y Jaén hizo una defensa de los seguros como método de garantizar las rentas de los productores. Igualmente abogó por la concentración de la oferta para no estar a merced de la distribución y sus prácticas abusivas.  
El acto comenzó con una charla técnica sobre productos para el cuidado del olivar. Rodríguez, en esta ocasión, prefirió no pronunciar discurso ante los presentes, que tampoco le plantearon preguntas. El encuentro terminó con una comida de convivencia en la que los asistentes conversaron acerca de la situación en la que se halla el campo alcalaíno.