La Universidad apuesta por la jubilación voluntaria

Con el objetivo de reorganizar las plantillas y de bajar la edad media del profesorado, la Universidad pone el marcha un plan de medidas incentivadoras para la jubilación voluntaria del profesorado. Se trata de una medida enmarcada en el plan de acción social de la institución académica.

    02 feb 2010 / 10:48 H.

    La de Jaén era la última de las instituciones académicas andaluzas en poner en marcha las medidas que incentivan la jubilación voluntaria del profesorado. Aunque se aprobó la normativa a finales del mes de julio, el plazo para poder acogerse concluyó el 31 de diciembre. Sin embargo, para que esa solicitud sea tramitada, es indispensable que el docente ratifique su decisión antes de un mes de haberla presentado.
    El gerente de la institución académica, Armando Moreno, detalla que la iniciativa contempla que los docentes no pierdan poder adquisitivo. “Un  profesor universitario se jubila obligatoriamente a los setenta años, cuando en el resto de las administraciones es a los 65 años y, después, pueden pedir continuar hasta los setenta”, explica.
    Con las medidas incentivadoras de la jubilación anticipada, la Universidad pretende, entre otros, facilitar el relevo generacional de los profesores y anticipar el cambio de la forma más racional posible. “Nos servirá para reorganizar las áreas de conocimiento y los departamentos, ya que hay algunas que están saturadas. La edad media del profesorado ronda los 46 o 47 años y, en esta primera edición de la normativa, creemos que son nueve los docentes que podrán solicitarla”, indica Moreno.
    La normativa tiene una vigencia que concluye en el año 2013 —aunque después se estudiará si se prorroga— y su desarrollo es más que sencillo. Se dirige a los profesores con dedicación completa y que hayan cumplido los sesenta y cinco años de edad. Durante los cinco años que restan hasta la edad que les corresponde para jubilarse, recibirán un incentivo anual igual a la diferencia entre sus retribuciones en activo y la pensión máxima de jubilación que establezca anualmente la Ley de Presupuestos Generales del Estado. De esta manera, los docentes tendrían el mismo sueldo que en activo hasta que llegue la hora de su “jubilación oficial”, es decir, al cumplir los 70 años.
    “Es en el mes de enero cuando los docentes tienen que mirar cuándo podrían acogerse al plan. Esta medida no es muy costosa para la Universidad y, sin embargo, aporta bastante beneficios para los trabajadores, como el rejuvenecimiento de la plantilla”, indica el gerente de la UJA. Inmaculada Espinilla/Jaén