La trama del Gürtel y el delicado manejo de los tiempos

Después del levantamiento del secreto de sumario del caso Gürtel, el aluvión de detalles sobre la trama no deja de sorprender a propios y extraños. Como comentaba ayer mismo el ex secretario socialista Jesús Caldera, no hay que llevarse las manos a la cabeza porque, a fin de cuentas, la corrupción es algo que “acompaña al ser humano”. La tentación está ahí caen personas de todos los partidos políticos, sin distinción de ideologías.

    16 oct 2009 / 14:59 H.

    Pero, eso sí, en lo que concierne al cese de Costa, lo que es criticable desde todos los niveles es el tiempo que se ha tardado en reaccionar, en depurar un mínimo de responsabilidades. Es lógico que desde el partido se arrope al máximo a los dirigentes en los que se tiene plena confianza, pero ese respaldo puede llegar a hacer mucho daño si no se cierran filas al cien por cien y se permiten voces disonantes dentro de la misma formación política. El líder de los populares sostiene su confianza en el presidente de la Generalitat Valenciana, hasta el punto de que acaba de señalarlo como candidato a las autonómicas del año 2011. Según las declaraciones de Rajoy, no está previsto que se depuren más responsabilidades en este asunto, una cuestión en la que él sostiene que ha habido una clara manipulación por parte del Gobierno. De cualquier forma, parece evidente que se intenta dar carpetazo a una trama que, a priori, está muy lejos de haberse agotado desde el punto de vista no sólo mediático, o político, sino, incluso, judicial. En determinadas circunstancias y, en política fundamentalmente, los tiempos son importantes y saber medirlos puede dar una idea de la altura del mandatario. Con todo, es clave no cerrar en falso y zanjar el asunto de manera clara y con determinación. Decisiones en su momento y sin vacilación. Una combinación de factores que da la impresión de que desde el PP no se ha sabido barajar como sería deseable.