La 'ruina inminente' amenaza al Torreón de Poblaciones Dávalos
Nuria López Priego / Jaén
Será un trabajo meticuloso y costoso, pero absolutamente necesario para preservar un legado del siglo XV. En Baños, la ruina aqueja al torreón de Poblaciones Dávalos y, para no tener que curar, el equipo de Gobierno local ha decidido prevenir. La próxima semana, empezarán obras de emergencia para limpiarlo y desmontarlo piedra a piedra.
Será un trabajo meticuloso y costoso, pero absolutamente necesario para preservar un legado del siglo XV. En Baños, la ruina aqueja al torreón de Poblaciones Dávalos y, para no tener que curar, el equipo de Gobierno local ha decidido prevenir. La próxima semana, empezarán obras de emergencia para limpiarlo y desmontarlo piedra a piedra.
Máximo exponente de la muralla defensiva que salvaguardaba Baños de la Encina, el torreón de Poblaciones Dávalos ha entrado en fase terminal. El peligro de derrumbe amenaza los seis siglos de historia que han acumulado sus piedras y la ruina es un enemigo “inminente” que aguarda en la Plazoleta del Rosario. “Se va a hundir”, certifican los partes de los técnicos que lo han auscultado. Y el riesgo es tal que, desde hace quince días, la calle Trinidad —“una de las más antiguas del municipio”, en pleno centro histórico— no solo está cortada al tráfico rodado, sino también a los vecinos, que, paradójicamente, acceden a sus viviendas por el Callejón del Cuidado y la calle Fugitivos.
El torreón de Poblaciones Dávalos clama una cura de emergencia y, precisamente, en ella trabaja el equipo de Gobierno local, que, sin ser propietario de este emblema del patrimonio bañusco, emprenderá, “la próxima semana”, una obra de urgencia “para atajar el derrumbe”. Será una intervención rápida, que rondará los 50.000 euros, indicó a este periódico el alcalde, Antonio las Heras (PSOE). E incluirá la limpieza del torreón y el minucioso trabajo de la catalogación del edificio piedra a piedra. “Lo fotografiaremos y numeraremos cada piedra para desmontar, después, la fachada. Luego, haremos el derrumbe de aquello que no tienen valor histórico y, en mejores fechas, cuando tengamos más dinero, lo montaremos. De esta forma, preservaremos la riqueza cultural e histórica del torreón”, explicó el munícipe.
El trabajo será meticuloso y, económicamente, un estacazo para las arcas municipales. “Aunque somos un Ayuntamiento saneado, esto no lo teníamos contemplado dentro de ninguna partida y supone reventar nuestro presupuesto”, confesó Antonio las Heras, que indicó que el equipo de Gobierno local está “buscando ayuda por todos lados” —desde la Junta a la Diputación y a las asociaciones a las que está adscrito el municipio— para poder hacer frente a una obra imperiosa. “Toda la premura que tenemos es por el miedo a que lleguen las lluvias”, explicó. La caída de “una nube” sería la sentencia de muerte del torreón de Poblaciones Dávalos.