La Ribera se rinde a su patrona

Los fuensanteños ganaron ayer el pulso al intenso calor. Desde bien temprano se concentraron en los alrededores del parque  y, unidos, emprendieron el camino hasta La Ribera, donde se celebra la tradicional romería en honor de Nuestra Señora del Carmen. Las fiestas, que comenzaron el viernes, llegaron a su “día grande”.
La jornada arrancó, pasadas las diez de la mañana, desde la Plaza del Ayuntamiento y tuvo como característica principal la admiración de los ribereños hacia su patrona. Durante todo el trayecto la imagen fue acompañada con las vistosas carrozas, los caballos y las peñas de romeros. No faltaron los cantes y bailes, ni tampoco el buen jamón y la cerveza, hasta el polígono industrial, donde se realizó un pequeño descanso. Después de horas de peregrinación, los vecinos llegaron hasta la ermita de La Ribera, situada en un lugar privilegiado, entre huertas y olivos.
La romería contó con gran variedad de actividades deportivas, culturales y lúdicas. A las veladas de baile en la plazoleta de la ermita y las “acampadas” de grupos de amigos y familiares en el campo para disfrutar de una inolvidable jornada de convivencia se sumaron, este año, los fuegos artificiales y, también, una ruta de senderismo desde la aldea hasta Frailes, que contó con una enorme participación y que resaltó por la degustación del típico desayuno cortijero. Para hoy también está prevista la eucaristía, presidida por el párroco, Miguel Ángel Jurado, y la posterior procesión, que cuenta con las marchas de la Banda de Música de Valdepeñas de Jaén.
La alcaldesa pedánea, Rosario Fernández; los hermanos mayores, Juan José Torres y María Custodia Hervás, y el presidente de la cofradía, Francisco Zuheros, invitaron a los vecinos a disfrutar de la fiesta. Fernández se mostró orgullosa de las colaboraciones recibidas para hacer posible esta gran romería. MARCIAL SÁNCHEZ / FUENSANTA