La pareja encarcelada pide al juez que los deje libres

Benita Callejas se marchó de su casa de la calle Goya de Arquillos sin dejar rastro. La Guardia Civil la buscó por tierra, mar y aire. La encontró al cuarto día de búsqueda. Sin embargo, lo que, en principio, parecía una desaparición, se convirtió pronto en una huída. Según contó a los investigadores esta joven arquillera de 19 años, se fugó de su casa para escapar de las supuestos malos tratos y agresiones sexuales que sufría, presuntamente, a manos de su madre, María del Carmen Ortega, y del actual compañero sentimental de la progenitora, Pedro Antonio Fernández. Tras escuchar su testimonio, la pareja está a punto de cumplir la primera semana en prisión preventiva.

18 jul 2014 / 22:00 H.


Fuentes cercanas a su defensa explican que solicitarán al Juzgado de La Carolina que instruye las diligencias su puesta en libertad provisional. Lo harán en un recurso que presentarán el lunes contra el auto judicial que decretó su encarcelamiento por delitos de agresión sexual, lesiones y corrupción de menores.
Las fuentes consultadas explican que no hay pruebas suficientes contra ellos. Según ha podido saber este periódico, el juez del caso basó su decisión tras escuchar la declaración de la propia Benita Callejas y de un testigo protegido que, al parecer, fue un vecino del pueblo que la ayudó a esconderse durante su “desaparición”. Ambos contaron a su señoría los supuestos abusos sexuales de los que la joven arquillera habría sido víctima desde años atrás. También, relataron palizas y amenazas, tal y como confirman las fuentes consultadas.
Ese mismo día, el pasado domingo por la tarde, el magistrado también procedió a la exploración de los tres hijos pequeños que tiene en común la pareja de detenidos. Uno de ellos, que cuenta con siete años, sí que confirmó lo dicho por su hermana. Al menos, en parte. Relató al juez que, en una ocasión, vio a su padre pegarle fuerte a Benita. Con esos testimonios, su señoría dictó el auto en el que enviaba a prisión preventiva a María del Carmen Ortega y a su compañero Pedro Antonio Fernández.
Sin embargo, su defensa pedirá al juez que los ponga en libertad. Entiende que los testimonios carecen de la credibilidad suficiente. Es más, recuerda que en la casa familiar también residía una hermana mayor de Benita, quien dijo no saber nada de los supuestos abusos, ni de las agresiones físicas.
El recurso será presentado en el Juzgado de Instrucción número 2 de La Carolina, una vez que el abogado de la defensa visite a sus clientes en el Centro Penitenciario de Jaén para que firmen el documento. A partir de ahí, el juez tiene que decidir si acepta los argumentos o si mantiene en prisión a la pareja de forma preventiva mientras sigue la instrucción de la causa.
Mientras tanto, en Arquillos, las aguas parecen haber vuelto a su cauce tras una semana de tensión, de rumores y de enfrentamientos vecinales. La Guardia Civil, por su parte, mantiene abierta la investigación para tratar de aclarar algunas partes de lo relatado por Benita.