La menor confiesa que mató a su bebé tras dar a luz y que lo hizo sola

El Juzgado de Menores, a instancia del Ministerio Público, decretó que la joven sea internada de forma cautelar en un centro privado ubicado fuera de la provincia jiennense. Se le acusa de un delito de asesinato, tal y como confirman fuentes judiciales cercanas al caso. Ingresará a partir del próximo lunes, una vez que sea sometida a unas pruebas psicológicas ordenadas por la juez para que los forenses dictaminen cuál es su estado mental. Mientras tanto, permanece hospitalizada y bajo custodia policial en una habitación del Maternal.
La decisión de internar a la menor se produjo tras cambiar la versión de los hechos que había dado a la Policía tras su arresto y reconocer de este modo que, tras dar a luz en su casa en la noche del pasado martes, mató a su bebé, una niña de más de tres kilos de peso. La autopsia reveló que la recién nacida llegó a respirar. Los primeros datos apuntan a que falleció por causas violentas. Posiblemente, fue asfixiada con una prenda de ropa interior de la madre anudada al cuello. El cadáver también presentaba cinco heridas punzantes en el pecho causadas por unas tijeras. Ese instrumento fue encontrado, manchado todavía de sangre, en una mesita de noche de la vivienda familiar. La joven reconoció estos hechos, tal y como confirman las fuentes consultadas en su declaración en sede judicial.
La adolescente exculpó a sus padres de toda responsabilidad. Hay que recordar que los progenitores fueron detenidos por la Policía en la tarde del jueves, porque había “piezas que no encajaban” en las coartadas que presentaron para explicar su participación en los hechos. La chica contó a la Fiscalía que estaba sola en su dormitorio cuando dio a luz y cuando acabó con la vida del recién nacido. Después, enrolló el cadáver en una toalla y lo ocultó en un armario de su cuarto. Seguidamente, llamó a su madre para decirle que se encontraba mal y que había sufrido una hemorragia, sin decirle que acababa de parir, según siempre su declaración.
Ya por la mañana del miércoles, los padres llevaron a la niña a Urgencias para ser tratada del sangrado vaginal. Los médicos detectaron, entonces, que acababa de dar a luz. En un primer momento, la adolescente lo negó. Después, reconoció que había tenido un niño, que había nacido muerto y que lo escondió en el armario. Fueron sus progenitores los que encontraron el cuerpo sin vida y lo llevaron al Hospital, que activó el protocolo para estos casos. Esa misma noche, era detenida la menor —llegará a la mayoría de edad el próximo 18 de mayo—. Al día siguiente, fueron arrestados sus padres, ya que la Policía sospechaba que ayudaron a su única hija a dar a luz. Eran los únicos que estaban en la casa donde ocurrieron los hechos y, para los investigadores, es “extraño” que no se percataran de nada de lo que ocurrió.
Rafael Abolafia / Jaén Más información en la edición impresa