La luz se ve muy cerca
Adri cuenta los días que le quedan para enfundarse la camiseta del Real Jaén y saltar de nuevo a un terreno de juego. Tiene ganas. Desde el 9 de marzo, cuando se lesionó en San Fernando con el Almería B, no ha tenido esa sensación. Sueña con volver a vivir esa experiencia.
Álex Cruz se lastimó un mes antes, el 2 de febrero, en un compromiso con el Lugo, en el minuto 64. Se lesionó en ese instante y fue sustituido, pero no se rompió definitivamente hasta el 5 de abril en un entrenamiento diario. En ese intervalo no jugó porque nunca llegó a encontrarse bien, aunque fue convocado en un partido con el Hércules. Estuvo en el banquillo. Los dos se rompieron el ligamento cruzado de la rodilla izquierda, la lesión más grave que puede tener un futbolista, y los dos han pasado un verdadero calvario. Adri lleva siete meses sin jugar y Álex Cruz, ocho. Ahora, ambos han visto la luz al final de este largo camino.
El canterano está a punto de ponerse a disposición de José Jesús Aybar. Pudo conseguirlo antes, aunque un problema muscular le retrasó la recuperación. Ya está listo. En un par de semanas puede tener el premio. El gaditano también ultima su puesta a punto. Su proceso marcha bien, aunque algo más lento. En un mes puede estar preparado. Solo una diferencia los separa: Adri está inscrito entre los veintidós de la primera plantilla y puede jugar cuando lo considere Aybar, mientras que Álex debe esperar al mercado de invierno para ser inscrito y ocupar una plaza.
“Me encuentro muy bien. Me siento fuerte. He entrenado bien con el grupo y espero reaparecer cuando los técnicos lo consideren. Lo he pasado mal en este tiempo, sobre todo en los primeros meses, pero, por fortuna, veo cerca el momento de volver a jugar”, asegura Adri, ilusionado con la idea de ponerse otra vez la camiseta del Real Jaén. “Se pasa muy mal. Sufrí mucho la temporada pasada. Estaba lesionado y no podía hacer nada para ayudar al equipo en su lucha por la permanencia. Fue terrible. Una grave lesión y un descenso. Lo peor de todo”, recuerda Álex Cruz, muy recuperado en el aspecto físico y, sobre todo, mental. “En este tipo de lesiones es determinante venirte arriba y estar bien en el aspecto psicológico. Ahora estoy bien. En el ámbito deportivo me encuentro en fase de integración al trabajo del grupo. Cada vez tengo mejores vibraciones”, apostilla.
Adri hace hincapié en que se encuentra, incluso, con más ilusión y ambición que antes de lesionarse. “Estar tanto tiempo sin jugar te cambia la perspectiva. Es una lesión que te hace pensar mucho. Por todo ello la sensación que tienes ahora es la de superar lo que has hecho antes. Te encuentras con más fuerza”, precisa. Y no se olvida de todos los que le han ayudado a superar este duro momento. “Gracias a mi gente y al Real Jaén por todo lo que han hecho para sentirme futbolista otra vez”, precisa. Álex Cruz se expresa en términos parecidos y muy agradecido a quienes le han prestado su respaldo. “A la clínica de Luis Baños, a José Miguel, Rafa Castillo y Felipe Ortega por todo lo que han hecho. Gracias a ellos he podido superar una lesión complicada”, concluye. Adri tiene la reaparición a la vuelta de la esquina. La de Álex también está cercana. Ese momento será como un volver a empezar para ambos.