La Junta crea una agencia para "estabilizar" La Laguna

El fin, según un comunicado de la Junta, es “garantizar la viabilidad económica, el buen servicio público formativo y la estabilidad de los trabajadores” y, para ello, dejan claro, se crea la Agencia Pública Andaluza para la Educación y la Formación (Apaef), a través de una ley autonómica; la otra medida aprobada supone la disolución de los consorcios, tal y como fueron creados, lo que implicará que los ayuntamientos no formen parte de ellos. El sistema entrará en vigor en enero en la escuela de hostelería y turismo de La Laguna, en el Puente del Obispo de Baeza.

La Laguna se mantendrá en la red andaluza, junto al consorcio dedicado al mármol, en Fines (Almería); los de hostelería de Cádiz, Lepe (Huelva) y los existentes en el municipio malagueño de Benalmádena y en la capital de esta provincia; además, continuará la enseñanza de la joyería en Córdoba; la artesanía y el patrimonio, en Granada; de la actividad maderera, en Encinas Reales (Córdoba) y tampoco cierra el centro que forma en los oficios artesanos, en Gelves (Sevilla). De inmediato, surge una pregunta: ¿cuándo cobrarán las nóminas los empleados? En el caso de la escuela baezana, 33 trabajadores van a sus puestos, a cambio de nada, desde el pasado mes de abril. Su caso no es una excepción y afecta, en mayor o menor medida, a sus compañeros del resto de consorcios andaluces.

Los impagos de salarios se unen a las deudas contraídas con los proveedores, casi doscientos en el caso de La Laguna,  según los propios delegados de personal. También se desconoce, por el momento, cuándo comenzarán las clases. Actualmente, las cocinas de la escuela baezana están apagadas y tampoco hay estudiantes en ninguna de las otras especialidades. De hecho, arrastran esta situación desde hace meses y todavía esperan que se les abone la subvención correspondiente al curso 2012/2013, que terminó el pasado 30 de junio. Además, esperan el 25% de la suma correspondiente al anterior ejercicio. Como se explicó a este periódico, ayer por la tarde, los delegados provinciales de Educación y los gerentes de los consorcios mantuvieron una reunión en la capital hispalense. Los trabajadores esperan que de este cónclave salgan las respuestas a todas las dudas que tienen y que, al cierre de esta edición, continuaban aún como incógnitas.

Lo que por el momento avanza la Administración andaluza es que las escuelas no dependerán de una subvención anual del Ejecutivo regional, sino que tendrán una asignación directa, a través de la agencia creada para tal fin. También se abre la puerta a los acuerdos de colaboración con el sector privado y las entidades locales para “garantizar la empleabilidad de los alumnos”. La Cámara de Comercio, como consta en el acuerdo del Consejo de Gobierno, no permite la participación de los ayuntamientos en los consorcios, al igual que las nuevas leyes estatales, cuando las competencias de estos órganos no sean municipales. Las nuevas medidas de control del gasto impuestas en la formación para el empleo, dice la Junta, además, obligan a estar al corriente en la justificación de todos los gastos, al igual que implican la necesidad de informar de todos los desembolsos anteriores, un proceso ya concluido.