La información es clave para que el consumidor se defienda

Aunque la estadística recuerde prácticamente todos los meses que el consumo se encuentra frenado de manera evidente por los efectos de la crisis, llama la atención que los usuarios hayan incrementado casi en un cincuenta por ciento sus denuncias por desajustes diversos, sobre todo, en el sector servicios. Da la impresión de que si bien se consume menos, en cierta forma, los jiennenses se sienten más estafados por lo que compran o contratan.

    16 mar 2010 / 11:47 H.

    Ese es uno de los datos oficiales que se presentaron ayer en la provincia con motivo del Día Mundial de los Derechos del Consumidor, una efeméride internacional que pone de manifiesto que todavía, a pesar del notable avance, existe un claro desconocimiento sobre las normas que amparan al cliente y los mecanismos a los que puede acogerse cualquiera en caso de detectar cualquier tipo de irregularidad. Casos como los de Forum y Afinsa revelan que, pese a los sistemas de control y a la cada vez mayor formación de los ciudadanos, las estafas están a la orden del día.
    A menudo, la sensación general es de indefensión, sobre todo, porque a menudo es más costoso y complicado iniciar un proceso de reclamación que el propio perjuicio en sí, por lo que se opta por no presentar queja alguna. Hoy por hoy son las quejas por las empresas de telefonía las que se encuentran a la cabeza de las reclamaciones de una forma clara, seguido también de los excesos de determinados bancos a la hora de cobrar comisiones. En líneas generales, si el ciudadano conoce mejor sus derechos y las herramientas para hacer que prevalezcan, podrá poner remedio a situaciones de abuso que, de otra manera, pueden quedar impunes. La desinformación es el peor enemigo del consumidor y, por eso, jornadas especiales como las de ayer ponen su énfasis en difundir cuanto más mejor todos los mecanismos que están a disposición del usuario para defenderse ante los abusos en la prestación de servicios.