La importancia de la buena gestión de los fondos públicos

Si la buena gestión de lo público es básica para el buen funcionamiento del sistema democrático, en tiempos de crisis se antoja fundamental para que cualquier paso que se dé tenga la garantía suficiente de éxito. En definitiva, se trata de, al menos, dar garantías suficientes para que el mercado recobre la confianza y, en la medida de lo posible, reactivarlo con las iniciativas que puede poner en marcha lo público. Los fondos estatales y autonómicos liberados son, en este sentido, un primer paso para que sectores sensibles de la economía no queden aislados de la actividad económica. Los cientos de obras que comenzarán en el nuevo año en los pueblos jiennenses y que son un pequeño motor para un primer semestre de 2009 calificado de muy malo por los expertos. Pequeñas y medianas empresas locales serán las beneficiadas de un dinero público que debe ser gestionado con criterio y en proyectos de calado para los municipios de la provincia. Por más que este sea un flujo de dinero que es obligatorio invertir, no se debería dilapidar en maquillaje urbano. En un momento en el que la banca sigue sin dar crédito a las empresas y particulares y con los augurios de que en el próximo año la tasa de paro en España se situará entre el 18% y el 19%, el aumento de la infraestructura pública es una opción con la que se puede salvar empleo. Pero siendo esta una aceptable medida, la economía española requiere que el resto de los agentes económicos se implique para remontar una situación que responde a parámetros cuantificables pero también al miedo que se ha instalado en la sociedad. De ahí que un ámbito como el bancario, privilegiado por las medidas gubernamentales, tiene que generar a su vez credibilidad dando a sus clientes, con los que ha realizado buenas operaciones en las últimas décadas, la confianza que no han perdido empresas que sostienen a miles de empleados.

    28 dic 2008 / 23:00 H.