La fumata blanca de los presupuestos llega sin crisis política

La negociación de los presupuestos de este año en el Ayuntamiento capitalino nada tiene que ver con el bochornoso espectáculo del que fueron partícipes el año pasado todos los ciudadanos, con unos socios de Gobierno municipal enfrentados, tanto en los medios de comunicación, como en las eternas reuniones que se desarrollaron.

    21 abr 2009 / 09:37 H.

    La sociedad asistió perpleja a una negociación más que tensa, que en algunos momentos llegó a hacer planear sobre PSOE e IU el fantasma de la fractura del pacto para sostener el poder en el Consistorio. Al final se cerraron las cuentas antes de llegar a mayores y, aunque con notable retraso, los presupuestos municipales pudieron cerrarse para evitar la paralización de la actividad municipal. En esta ocasión, los ciudadanos pueden felicitarse, no sólo por contar con los presupuestos, sino por el discreto proceso político que se ha seguido para llegar a materializarlos. El concejal de Economía y Hacienda, Manuel Fernández Palomino, ha dado a conocer los grandes rasgos de las cuentas para el año en curso, en un preludio de lo que serán sucesivas comparecencias públicas para desgranar paso a paso todas las inversiones previstas. La nota más destacada, en una coyuntura de crisis como la actual, es el proyecto de ingresar hasta cuarenta millones de euros por la venta de suelo de titularidad municipal, una operación necesaria para unas arcas más que desgastadas, como ya es sabido, con una deuda de 300 millones de euros y un ahorro negativo del 23 por ciento. La situación financiera es crítica y, en ese contexto, ha sido complicado moverse por los márgenes que establecía el Plan de Saneamiento auspiciado por la Junta de Andalucía en el que ahora se mueve el Ayuntamiento jiennense. Con los números sobre la mesa es el momento de comenzar a desarrollarlos para lograr el máximo de ejecución que, a fin de cuentas, es de lo que se beneficiarán los vecinos de la capital.