La falta de seguridad imposibilita reabrir el mirador de La Alameda

Por errores en la construcción o porque la nueva infraestructura se dejó a medio hacer, lo cierto es que la terraza de la Alameda continúa cercada y sin visos de estrenarse, al menos, a corto plazo.  Del antiguo mirador no queda prácticamente nada. Lo único que hay es un muro de contención, con un balcón de cemento y una barandilla de obra. Una estructura que, en opinión del portavoz del equipo de Gobierno, Miguel Ángel García Anguita, es insuficiente para garantizar la seguridad de los ciudadanos.
En la misma sintonía se expresa el concejal responsable de la Empresa Pública de Aparcamientos y Servicios (Epassa), Juan José Jódar, que, en la última visita a la zona, lamentó la pésima gestión que el anterior equipo de Gobierno hizo de las obras, tanto del estacionamiento como del propio mirador, donde la Gerencia de Urbanismo se gastó un millón de euros aproximadamente en su reconstrucción. Parte del mirador que hay sobre el antiguo campo hípico, donde, hoy en día, se levantan las dos primeras plazas del aparcamiento, cedió en el invierno de 2010 como consecuencia de las filtraciones de agua, lo que obligó al Ayuntamiento a intervenir de urgencia. La endeblez de la tapia, debido al deslizamiento de tierra, no dejó otra alternativa que reforzar la estructura y evitar que se viniera abajo. La Gerencia de Urbanismo encargó los trabajos a la misma empresa que acometió las obras del nuevo parking de La Alameda. Las primeras labores se centraron en el derribo parcial de la pared que separa el parque de la terraza mirador. Una vez liberada la zona, se instalaron unas vallas metálicas que aún permanecen. Sin embargo, la intervención no está completa en tanto no existe una plataforma que comunique el parque con la terraza. “Es otra chapuza más, al igual que el aparcamiento, que carece de accesos y que ni se preocuparon en acabar”, denuncia Miguel Ángel García Anguita.
Javier Esturillo/Jaén