La etarra del atentado de Hipercor sale de la cárcel
Al filo de las diez de la mañana, Josefa Ernaga Esnoz, una de las más sanguinarias terroristas de ETA, abandonaba la prisión de Jaén, donde ha permanecido ingresada el último lustro. Varios familiares la recibieron con besos y abrazos, según explican testigos presenciales.
La mujer, que era miembro del comando “Barcelona” y actualmente tiene 63 años, ha cumplido solo 27 de los más 2.000 años por los que fue condenada. En su historial está el brutal atentado cometido contra el Hipercor de Barcelona, en 1987, en el que murieron 21 civiles, cuatro de ellos niños, y otras 45 resultaron con heridas graves.
Ernaga, junto a 35 presos etarras más, solicitó su excarcelación en octubre de 2013 en virtud de la sentencia de Estrasburgo que derogaba la doctrina Parot. Con la aplicación de esta tesis, la terrorista no habría salido de la cárcel el 27 de agosto de 2017, tras haber cumplido lo máximo que permite el Código Penal, es decir 30 años.
La miembro del comando “Barcelona” emprendió el camino de vuelta hacia el municipio navarro de Mezquiriz, acompañada de numerosos allegados que viajaron en coches particulares. La etarra fue detenida en Barcelona el 5 de septiembre de 1987 por formar parte del comando terrorista que llevaba el nombre de la capital catalana. Los tribunales la condenaron a penas que sumaban más de 2.000 años de cárcel por diversos atentados terroristas. El más grave fue el del Hipercor de Barcelona, por el que le cayeron 794 años de cárcel. En su historial también constan los asesinatos en la Ciudad Condal de un policía, un guardia civil y un civil, así como la colocación de bombas en empresas que no causaron víctimas mortales.