La Estrella resplandece en Navas
Nuria López Priego/Jaén
Ni la lluvia ni los cielos invernales del primero de mayo, ni siquiera el enfrentamiento palmario entre la junta de gobierno de la Cofradía y el párroco de Navas, Bartolomé Martínez, han mermado la luz de la patrona navera. La Virgen de la Estrella ha reverberado entre flores, 'mayos' y trajes de faralaes en los días grandes de su romería.
![Imagen de la Virgen de la Estrella, el pasado domingo. Foto: Joaquín Arroyo.](images/stories/diariojaen/provinci/110503prov6.jpg)
Ni la lluvia ni los cielos invernales del primero de mayo, ni siquiera el enfrentamiento palmario entre la junta de gobierno de la Cofradía y el párroco de Navas, Bartolomé Martínez, han mermado la luz de la patrona navera. La Virgen de la Estrella ha reverberado entre flores, 'mayos' y trajes de faralaes en los días grandes de su romería.
“¡Dios te salve, Señora,/mi Virgen de la Estrella!/Del mundo de la gracia/única tesorera,/cuyos bienes repartes/a tus hijos de Navas/y siempre a manos llenas”. Estos versos de Jerónimo Bernabéu, magistral de Cádiz, para el programa de romería de la Virgen de la Estrella, sintetizan el sentir de un pueblo que, un año más, se ha entregado a las fiestas populares en honor de su patrona. La Estrella ha reverberado entre sus fieles al compás de los tradicionales “mayos”, de las sevillanas, del colorido mes de María y de típicos vestidos de faralaes, en una romería a la que, el pasado sábado, introducían la hermosa ofrenda floral y las palabras sentidas de Diego González Carrasco en un emocionante pregón, que, por primera vez en años, no se celebró en la iglesia, sino en el salón parroquial.
El domingo llegó el día grande de la romería y la Banda de la Escuela de Música Municipal se encargó de que todos los ciudadanos se enteraran de ello con una alegre diana tocada a las ocho de la mañana. A mediodía, se celebró una eucaristía que estuvo amenizada por el coro rociero “Aires naveros”, pero el momento culminante llegó, por la tarde, con la procesión de la patrona desde la ermita hasta el monolito en el que se apareció, según las crónicas. El desfile volvió a repetirse ayer por la tarde y los “mayos” pusieron el broche a la jornada, aunque no a las fiestas, que continúan hoy y mañana.