La economía española es la que más crecerá, según el FMI
La economía española crecerá este año a un ritmo del 3,1%, según el Fondo Monetario Internacional (FMI), que confirma así su pronóstico del pasado mes de junio, lo que sitúa a España como la economía desarrollada con mejor evolución en 2015.
De cara al próximo año, el FMI espera que el PIB de España crezca un 2,5%, confirmando la estimación del mes pasado. De este modo, el FMI ha revisado seis décimas al alza sus previsiones para España en comparación con el informe de perspectivas publicado el pasado mes de abril, a pesar de la situación de incertidumbre en Grecia y su posible salida del euro.
No obstante, desde el FMI han expresado preocupación cuando se habla de “milagro español”, ya que “un 3% es bueno, pero mirando la tasa de desempleo aún queda mucho para cantar victoria”. “Sentimos bastante optimismo, la tasa de crecimiento en muy buena noticia, pero hay riesgos”, señaló el economista jefe de la institución, Olivier Blanchard.
En su informe, el FMI estima que la economía global crecerá menos de lo previsto este año como consecuencia de la contracción del Producto Interior Bruto (PIB) de EE UU en el primer trimestre del año, lo que ha llevado al Fondo Monetario Internacional (FMI) a rebajar una décima su previsión de expansión mundial este año, hasta el 3,3%, mientras que ha confirmado el pronóstico para 2016 en el 3,8%. La institución revisa también a la baja su pronóstico de crecimiento para las economías desarrolladas, para las que augura un crecimiento del 2,1% este año, frente al 2,4% previsto en abril, confirmando la previsión del 2,4% en 2016. En la zona euro, prevé un crecimiento del 1,5% este año, en línea con su anterior proyección, mientras que ha mejorado una décima el pronóstico del próximo año, hasta el 1,7%.
En cuanto a los mergentes, el FMI espera un crecimiento del PIB del 4,2% en 2015, frente al 4,3% anticipado anteriormente, mientras sigue confiando en una expansión del 4,7% el próximo año.
A este respecto, la institución dirigida por Christine Lagarde señala que la desaceleración se explica por el impacto perjudicial de la caída de los precios de las materias primas y del endurecimiento de las condiciones de financiación, particularmente en Latinoamérica y los países exportadores de petróleo. De este modo, el FMI recorta medio punto porcentual su previsión de crecimiento del PIB para Brasil.