"La droga me robó veinte años de mi vida"
Era un deshecho social, pero ya estoy recuperado”. Es el resumen que José Ángel Serrano Gómez hace de su vida. Tiene treinta y ocho años y, durante más de veinte, estuvo “enganchado a las drogas”. Su adicción le costó la entrada en prisión por robo con fuerza. Todo era válido si eso lo ayudaba a conseguir las sustancias. Desde el pasado 9 de junio está en libertad vigilada y su mayor objetivo es poder encontrar un trabajo con el que sacar adelante a sus dos hijas, de once y siete años, respectivamente.
Es consciente del daño que ha hecho y, muchas veces, llora a solas, pero tiene que luchar. Todo comenzó cuando solo era un niño. Con dieciséis años empezó a fumar porros para integrarse con los amigos y, de ahí, pasó a la cocaína y a la heroína. “No me di cuenta de que estaba destrozando mi vida y la de los míos”, señala, al mismo tiempo que añade, con orgullo: “Llevo cuatro años sin tomar drogas. Estoy totalmente limpio. En la prisión me hacen análisis que lo acreditan.Mis padres han recuperado al hijo que querían”.
José Ángel Serrano se emociona al recordar todo lo sucedido y no deja de reseñar el arrepentimiento que siente. Se encuentra preparado para empezar de nuevo, pero necesita un empleo. “Tengo miedo al rechazo social. Por otro lado, todo está muy complicado”, comenta. Por este motivo, para aprovechar cualquier oportunidad que le pueda surgir, dedicó el tiempo en la cárcel a estudiar. Entre otros obtuvo el título de EducaciónSecundaria y realizó cursos de hostelería, de modelado de barro y de manipulador de alimentos.
En la actualidad, vive con sus padres y sus dos hijas. Solo espera que, un día, suene su teléfono para comunicarle la noticia que anhela. José Ángel Serrano está dispuesto a trabajar en lo que le ofrezcan. Su única pretensión es garantizar el futuro de su familia. Quiere una segunda oportunidad para retomar la vida que la droga le robó y demostrar a los suyos que se puede contar con él.