La desaparición del festival de arte flamenco de Pegalajar

Luis Chica Hermoso, desde Pegalajar.- Es para mí un deber hacer de nuevo un esfuerzo para intentar salvar lo que creé con tanto esmero y conseguí subir a cotas inimaginables. Estoy dispuesto a salvar el festival de la mediocridad en la que está enterrado y conseguir que, de nuevo, brille con luz propia. Para ello, si lo desean, pediré que se despolitice completamente.

    04 ago 2011 / 08:42 H.

    Seguía muy de lejos como un indocumentado ponía al festival a los pies de los caballos, como no sabían distinguir, el verdadero cante “jondo”, lugar donde se instaló el festival desde su nacimiento, de la opera flamenca, chabacanería heredada de los pases cupleteros de la España de los años 40. Pido seriedad, que nos dejemos de politiqueos baratos y luchemos por algo que tuvo su nacimiento con seriedad y sabiendo a conciencia qué se pretendía. El festival está herido de muerte y, este año, ya pretenden acabar con él, definitivamente. No es que haya personas interesadas en acabar con el festival, es que no saben ni han entendido la linea artística que siguió, y hablo de los doce primeros festivales. Si alguna autoridad presente o pasada, desea colaborar, aquí me tiene, pero pido que se abstengan los folclóricos, marcheneros, valderrameros y personas que solo deseen aprovecharse de un espectáculo que fue de lo más puro que se realizaba por estas tierras. Invito, desde estas líneas, a que colaboren los tres partidos políticos más importantes en el Ayuntamiento de Pegalajar. Solo pondré una condición, que se despolitice el festival. No sé, ni quiero saber, quién ha colaborado este año con el festival, ni quien ha sido el que ha contratado a los artistas, pero estoy convencido de que si lo viesen “Tía Anica” o “La Perrata” volverían a morir. Antes teníamos la chabacanería, representada por un representante de la opera flamenca y ahora con un gitanito aflamencado solo de la fiesta de la barca y milongas de este tipo. El festival está en vías de desaparición y es muy urgente un tratamiento quirúrgico, donde hay mucho que estirpar. Prometo que este invierno el pueblo de Pegalajar, va a saber toda la verdad de quienes han sido los causantes de los males del festival y cómo algunos no deberían ni asistir al festival por haber dado lugar a esta situación. El público en general, cuando vio el cambio que experimentó el festival, no muy entendido, a los dos o tres festivales que seguían en la nueva línea, lo abandonaron a su suerte y no quisieron seguir aguantando una ópera flamenca, que de “jonda” no tenía nada. Espero que sepamos responder los verdaderos aficionados a este arte sin igual.