La ciudad honra la labor del profesor Manuel Sotomayor

El salón de plenos del Palacio Municipal albergó la ceremonia de entrega de la Medalla de Oro de la Ciudad de Andújar al arqueólogo Manuel Sotomayor Muro. De esta forma, el municipio iliturgitano reconoce la labor del profesor, que descubrió el yacimiento arqueológico de Los Villares, en la década de los setenta del pasado siglo. Además, fue el responsable de las primeras ocho campañas de excavación en la pedanía de Andújar. Sacó a la luz uno de los centros de producción de terra sigillata más importantes del Imperio Romano.

16 may 2014 / 22:00 H.


Al acto asistieron numerosos amigos, familiares y personalidades de la sociedad iliturgitana. El alcalde, Jesús Estrella, presidió la ceremonia, acompañado del resto de miembros de la Corporación Municipal. Fue el encargado de abrir la sesión extraordinaria, en el pleno del Ayuntamiento y dio la palabra a la concejal de Cultura, Delia Gómez. Hizo una breve semblanza de la vida y obra del arqueólogo que da nombre al Museo de Arqueología de Andújar, ubicado en el Palacio de los Niños de Don Gome. A continuación, el alcalde impuso la Medalla de Oro de la Ciudad a Manuel Sotomayor y le entregó un diploma acreditativo de dicho reconocimiento público y unánime. En el turno de intervenciones, el profesor Sotomayor mostró su gratitud hacia los que le reconocieron sus méritos y compartió sus recuerdos “llenos de cariño y añoranza”. Además, Sotomayor hizo una mención especial a dos de sus habituales colaboradoras, Mercedes Roca y María Isabel Fernández. “Durante diez años acudí, por cierto, bien acompañado, cada verano a Andújar, con el fin de ir descubriendo y conociendo el yacimiento de Isturgi, explorado exclusivamente en su sector industrial, que resultó ser el centro de producción de cerámica ibero-romana y romana más importantes de la mitad sur de la península”, comentó Sotomayor.
Por su parte, Jesús Estrella destacó su importante aportación al patrimonio cultural de la ciudad, con sus hallazgos y sus publicaciones. También señaló que se han producido centenares de adhesiones, la mayoría de ellas colectivas, de asociaciones, entidades, instituciones y centros escolares entre otros. Además, el alcalde apuntó que la distinción, en sus palabras, supone refrendar el cariño y el respeto que existe hacia el profesor Sotomayor, del que dijo que es “una persona erudita, sencilla, afable y cercana”.
Por último, el homenajeado, ante la atenta mirada de los presentes, firmó —sin que le temblara el pulso a pesar de sus más de noventa años de edad— en el Libro de Honor del Ayuntamiento.