La ciudad despide a López Poveda

La jornada de ayer quedará marcada, de forma especial, en el calendario. Uno de los personajes más ilustres de la sociedad y la cultura local, Alberto López Poveda, fallecía a los 99 años de edad. El máximo difusor de la obra del guitarrista Andrés Segovia será recordado por numerosos vecinos, pues su trayectoria personal y profesional le hicieron convertirse en una persona reputada y querida.

18 jul 2015 / 09:16 H.

López Poveda fue un hombre entregado con diferentes causas, entidades, instituciones, asociaciones y colectivos locales de muy diversa índole. Entre sus grandes logros se encuentra la constitución de la Fundación Casa-Museo Andrés Segovia, el lugar que precisamente albergó su féretro para que numerosos familiares, amigos y conocidos, así como autoridades y personalidades, le rindieran su último adiós. Fue allí, en el patio central de la casa palaciega, donde se instaló la capilla ardiente del hijo predilecto de la ciudad de Linares.

“Ha muerto el último caballero que quedaba en esta sociedad, un ejemplo de entrega y generosidad. Don Alberto ha dedicado toda su vida al servicio de los demás, de su gente, de las personas que lo han rodeado. Es un ejemplo para todos en cuanto a humanidad”, afirmó el alcalde, Juan Fernández, en referencia a Alberto López Poveda, cuyo estado de salud era “ya muy delicado en los últimos”, según indicó el regidor.
Su dedicación profesional estuvo ligada a la antigua fábrica de aluminio, donde entró como aprendiz, con tan solo quince años, y de la que acabó siendo el director.

López Poveda destacó por ser el precursor del Museo de Andrés Segovia, además de su biógrafo oficial. Formó parte de numerosos colectivos benéficos y, dentro de su gran trayectoria, resalta que fue concejal del Ayuntamiento de Linares en la década de los 40 del siglo pasado, hermano mayor de la Cofradía de la Virgen de Linarejos, receptor del primer premio local de Cultura en 1992, hijo predilecto de la ciudad y consejero de honor del Centro de Estudios Linarenses. Asimismo, Diario JAÉN le otorgó el premio Jiennenses del Año 2002, en la categoría de “Valores Humanos”. El funeral será hoy, a las once, en Santa María.