21 may 2014 / 22:00 H.
La Catedral de Jaén merece ser Patrimonio de la Humanidad aunque el informe de Icomos (Consejo Internacional de Monumentos y Sitios), que visitó Jaén, no recoja positivamente la continuidad de la Catedral jiennense con los edificios y conjuntos monumentales de Úbeda y Baeza. Y no será por falta de información, ya que las personas que acompañaron a los expertos de Icomos son las idóneas para explicar y resaltar los valores del monumento catedralicio y su indudable conexión y continuidad con Baeza y Úbeda. La decepción ha sido enorme, aunque dicen que ese informe no es vinculante, pero sin duda pesa en contra, claro que pesa, porque es de suponer que lo han redactado especialistas cualificados. Lo que no se comprende desde una modesta posición de observador atento es qué criterios han seguido para dictaminar la “no continuidad” antes mencionada. Es más, creo que se podría extender a la iglesia de Huelma, conjunto que deberíamos ofrecer a los turistas integrado con visitas a las sierras y espacios naturales jiennenses. Por todo esto, creo que podemos afirmar rotundamente que la Catedral merece el nombramiento y mucho más.