La Catedral avanza con paso firme hacia su declaración patrimonial

Esperanza Calzado / Jaén
La adhesión de la Catedral de Santa María a la declaración de Patrimonio de la Humanidad de Úbeda y Baeza está cada vez más cerca. Los últimos estudios certifican la influencia de Andrés de Vandelvira en la arquitectura latinoamericana del Renacimiento, uno de los requisitos indispensables. 

    18 abr 2009 / 09:31 H.

    El concejal de Cultura, José Montané, junto con el director de Gálibo Consultores de Patrimonio Cultural y responsable de la elaboración del expediente para proponer la Catedral de Jaén como Patrimonio de la Humanidad, Francisco López, presentaron, ayer, el primero de los informes que se adjuntarán al expediente que se remitirá a la Unesco.
    El documento certifica uno de los requisitos básicos para la adhesión del templo jiennense a la declaración: su influencia y valor universal. López anunció que las investigaciones ponen de manifiesto que más de media docena de catedrales de latinoamérica se inspiraron en la arquitectura renacentista de Andrés de Vandelvira. De esta manera, se certifica que los templos de Mérida, Guadalajara, México, Lima, Bogotá, Guajaca o Puebla, entre otras ciudades de América latina, beben de las fuentes del artista del siglo XVI, que diseñó la traza de la seo.
    Después de un importante análisis comparativo, Francisco López llegó a la conclusión de que la Catedral de Jaén fue un modelo de templo catedralicio renacentista en América, lo que le infunde ese valor universal. El siguiente paso será el próximo mes de junio, cuando Gálibo Consultores entregue al Ayuntamiento de la capital el informe completo, con todos los requisitos que exige la Unesco para la declaración. La previsión es que en noviembre de este año el expediente esté finalizado, de acuerdo con los plazos previstos en el contrato que se firmó a finales del año pasado, según Montané y López. El convenio contemplaba la entrega de tres informes parciales para dar cuenta de los avances. El de ayer fue el primero de ellos. El documento final establecerá la impronta de la escuela de Vandelvira en latinoamérica y la huella del Renacimiento en este territorio, en los siglos XVI y XVII, no sólo constructivamente, sino también en la religión y en la sociedad. López argumentó que las migraciones andaluzas de esos siglos propiciaron la influencia.