La Cámara vende su casa
Quién le iba a decir a José Cos Serrano —presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Jaén de 1927 a 1930— que la inversión que propuso a los empresarios del pleno en 1930 y que después continuó su sucesor, que fue Pancracio Troyano Troyano —presidente de 1930 a 1939—, como fue la compra de una casa en la calle Hurtado, iba a servir para que los emprendedores jiennenses pudieran salvar la institución 85 años después. La Diputación Provincial y la Cámara de Comercio e Industria de Jaén han cerrado el acuerdo. La Administración se queda con el edificio y pagará 2.767.428 euros, que saldrán de una partida que, incluso, figura en el propio presupuesto. La Cámara se lo entrega para siempre totalmente vacío e indemnizará al actual inquilino, que es el despacho de abogados de José Manuel Medina Cuadros.

El pleno de la Cámara de Comercio ya le ha dado el visto bueno y la Diputación Provincial se ha comprometido a comprarlo, por lo que se espera que la firma de la escritura en la notaría se haga muy pronto. De hecho, a la Cámara le urge, ya que la demora le conlleva más gastos, ya que el dinero le servirá para aminorar su deuda. “Esta operación nos permite sacar la cabeza. Nos queda dinero por pagar, pero ya es algo totalmente controlado que podremos afrontar con los proyectos que tenemos aprobados. Estoy convencido de que se trata de una magnífica compra para la Diputación Provincial, ya que el inmueble se encuentra en pleno corazón de Jaén”, afirma el presidente de la Cámara de Comercio e Industria, Manuel Barrionuevo. “Quiero destacar la sensibilidad que ha demostrado con la institución, ya que la venta del edificio es determinante para la supervivencia”, continúa el presidente.
El pleno de la Cámara de Comercio e Industria ya conoce la operación y los euros que dejará en las arcas de la institución. No obstante, no todo será dinero “contante y sonante”, ya que la Cámara utilizará la venta para “traspasarle” el crédito que pidió a la Caja Rural de Jaén el pasado 30 de diciembre, que le valió para pagar a sus extrabajadores y levantar todos los embargos. Importa algo más de un millón de euros. Precisamente, a finales de junio, el pleno de la Cámara de Comercio fue el que paró la operación. Entonces, la oferta de la Diputación —en función de una tasación de sus técnicos— era de 2,3 millones. Sin embargo, se consideró muy baja y se esperaba, al menos, 2,5 millones. Al final, el precio de venta es de 2.767.428 euros. Este aumento de 467.428 euros se debe a que dos inmuebles que tiene la Cámara de Comercio en la calle Bernabé Soriano —se comunican con el edificio de la calle Hurtado— entrarán ahora también en la operación y antes no estaban. Son alrededor de 300 metros cuadrados más. De esta manera, la casa que compró José Cos Serrano, como presidente de la Cámara, el 30 de abril de 1930 por 153.461,77 pesetas —según consta en la escritura pública— a Doroteo Relaño servirá para que la institución no tenga que echar el cierre. Se la venderá Manuel Barrionuevo a Francisco Reyes —como máximos representantes de la Cámara y de la Diputación—, 85 años más tarde, por 2.767.428 euros. El acuerdo está cerrado, aunque todavía faltan que se estampen las firmas. Hace ya casi un siglo, se entregaron 90.951 pesetas cuando se firmó la escritura, que tenía una cláusula que establecía el segundo pago, de 62.500 pesetas, el 25 de enero de 1931, que ya asumió Pancracio Troyano Troyano, que relevó a José Cos Serrano en la presidencia. Ahora, la negociación ha durado más de un año y no ha sido nada sencilla. Parece que, al final, contará con un final feliz.