La AMPA del colegio de Canena pide 'celeridad' en las obras de la N-323
Nuria López Priego/Jaén
'Preocupados por la seguridad de sus hijos', padres de alumnos del colegio Nuestra Señora de los Remedios, de Canena, han trasladado a la Subdelegación del Gobierno y a la Demarcación de Carreteras 'su gran indignación' ante la falta de información sobre la duración de las obras en la N-323
'Preocupados por la seguridad de sus hijos', padres de alumnos del colegio Nuestra Señora de los Remedios, de Canena, han trasladado a la Subdelegación del Gobierno y a la Demarcación de Carreteras 'su gran indignación' ante la falta de información sobre la duración de las obras en la N-323
y reclaman “celeridad” en unos trabajos que “todavía no han comenzado”.
“Entendemos que la situación es grave, debido a los daños producidos en la vía principal [la N-323], y que es una situación de emergencia, por lo que ha sido necesario este desvío” por la travesía de Canena. Sin embargo, los padres de alumnos del colegio Nuestra Señora de los Remedios se quejan, en sendos escritos remitidos a la Subdelegación del Gobierno en Jaén y a la Demarcación de Carreteras de Andalucía Oriental, con sede en Granada, de que “una tranquila calle se ha convertido en una carretera nacional que soporta una altísima densidad de circulación, lo que supone un aumento importante del peligro en cuanto a la circulación local de vehículos y, sobre todo, de los peatones”. En sus cartas, recuerdan: “Esta calle es muy transitada, ya que en ella hay varios locales de ocio, así como un parque infantil”. Y denuncian que la limitación de velocidad a su paso por el pueblo “no está siendo respetada”. Por todo ello, la junta directiva de la Asociación de Madres y Padres Fuentenueva, del colegio canenero, reclama, por un lado, una solución definitiva para la reparación del tramo de carretera afectado en la N-323 “para así evitar futuros desvíos por Canena, como el que se produjo durante 42 días en el invierno pasado y el que existe desde el día 8 de mayo” y, en segundo lugar, “celeridad en las obras, puesto que —se quejan los padres—, a día de hoy, todavía no han comenzado”.
También Juan Serrano, alcalde de Canena, se suma a estas protestas. “Las reivindicaciones son justas”, asevera el munícipe. “En la zona, hay un parque y ha dejado de utilizarse y, además, esto le ha cambiado la vida a cinco o seis negocios, que esperaban hacer el agosto y, de esta forma, van a cerrar”. Tanto los padres, como Serrano, se quejan de que el socavón en la N-323 se registró a principios de mayo y las obras ni siquiera han empezado, “ni hay plazos de ejecución”. En este sentido, desde la Subdelegación del Gobierno en Jaén, afirmaron que el comienzo de los trabajos es inminente. En cuanto a la demanda de “medidas de seguridad reales y efectivas” que realiza la AMPA del colegio, que, propone que se aumente la vigilancia policial en el tramo e instalación de semáforos, entre otras cuestiones, ayer, operarios de la empresa Ferroser —encargada de la conservación de ese tramo de carretera— empezaron a instalar bandas sonoras y a pintar la señalización horizontal necesaria en la travesía, como pasos de peatones y la línea de limitación del eje de la calzada.