La alcaldesa perpetua, para siempre en el Ayuntamiento

Los actos “fuertes”  para conmemorar el cincuenta aniversario de la coronación diocesana de María Santísima de la Villa arrancaron  ayer de una forma muy especial. Miembros de la cofradía se desplazaron hasta la entrada principal del Ayuntamiento, en la Plaza de la Constitución, donde les esperaba el alcalde, Francisco Delgado; la concejal de Cultura, Custodia Martos, y otros ediles del equipo de Gobierno. Celebraron que se había rescatado del olvido y restaurado un azulejo de “La Labradora” y ocupaba “para siempre” un lugar importante en el edificio, puesto que, además de la “Reina de la Villa”, es la alcaldesa perpetua de la ciudad. Así lo reflejó el alcalde, que explicó que, aunque este azulejo había sido quitado del Ayuntamiento con motivo de las obras que se ejecutaron, por fortuna no se perdió y se pudo conservar. “Sé que no va a tener el rechazo de nadie porque la Virgen de la Villa es venerada desde hace mucho tiempo”, manifestó.

20 sep 2014 / 08:19 H.


Por su parte, Custodia Martos expresó que fue la cofradía quien planteó la recuperación del azulejo, por lo que desde el equipo de Gobierno se buscó hasta dar con él, y luego lo restauró el artista plástico José Antonio Rivas. Asimismo, el presidente de la Cofradía de la Virgen de la Villa, Fidel Díaz, apuntó que se trataba de un “día alegre” para esta hermandad, de modo que agradeció la labor realizada para “rescatar del olvido” un azulejo que también forma parte del patrimonio marteño. Además, recordó que fue una familia de la ciudad la que se hizo cargo de los gastos para restaurar el cuadro que ya luce en el Ayuntamiento de la ciudad.
De igual manera, Fidel Díaz destacó la buena aceptación con la que se desarrollan los actos del cincuenta aniversario de la coronación diocesana de “La Labradora”, que continuaron ayer por la tarde, cuando la imagen salió de su santuario y fue trasladada hasta la capilla del colegio San Antonio de Padua. Durante el recorrido estuvo acompañada por una nueva banda de la ciudad, la de Nuestra Madre y Señora del Mayor Dolor, de la agrupación parroquial San Francisco de Asís. La jornada fue aún más grandiosa, ya que el joven músico Alejandro Huete compuso una marcha para la Virgen de la Villa, titulada “Labradora Coronada”, que se estrenó ayer.
Por último, el presidente de la cofradía animó a los marteños a hacer histórico el día de hoy, al igual que ocurrió hace medio siglo. Fidel Díaz indicó que los cultos de esta jornada comienzan a las cinco y media de la tarde, con el traslado de la venerada imagen hasta el altar instalado en la Avenida del Oro Verde, donde se celebra una misa, presidida por el obispo de la Diócesis de Jaén, Ramón del Hoyo. Para terminar, la Virgen de la Villa es procesionada hasta su santuario, con el acompañamiento de la agrupación Maestro Soler.