Jona comanda el despegue
El Real Jaén somete hoy la exhibición contra el Sporting a la prueba del algodón. Está por ver si el equipo de Herrero da continuidad a su versión de “matagigantes” o recae en la espesura que suele mostrar ante enemigos con los que comparte urgencias, como el Alcorcón, rival directo por la permanencia. Jona, “pichichi” blanco, amenaza Santo Domingo.

El Real Jaén quiere corroborar la imponente exhibición de fútbol realizada contra el Sporting, otro histórico que salió magullado de La Victoria, con su segunda conquista consecutiva en Liga. La belleza del triunfo sirvió para romper la dinámica negativa, pero no tuvo el efecto deseado en la lucha por perder de vista el descenso. Todos los equipos implicados en la lucha por la salvación cumplieron; el abismo sigue a un punto. Esta tarde, los jiennenses tienen la oportunidad de dejar atrás el aliento del Alcorcón, este sí un rival directo por la permanencia. Por lo tanto, apetece comprobar qué versión del Real Jaén comparece en el Estadio Santo Domingo: si la del plantel que sufre ante los humildes o el que se agiganta ante los poderosos. Conviene mantener la línea de rendimiento exhibida en la segunda parte del partido contra el Sporting, tanto por la posibilidad de dejar al Alcorcón a cuatro puntos como por la de ganarle el “golaverage” particular, estadística con visos de convertirse en llave de la salvación en la Liga Adelante más apretada de los últimos años. En la primera vuelta, Jona, “pichichi” blanco con 14 tantos, resolvió en una maniobra y facilitó el triunfo al Real Jaén, que realiza la primera visita de su historia al Estadio Santo Domingo, escenario cuya sola mención despierta el sonrojo en media España. Aquella gesta situó en el mapa mediático al Alcorcón, equipo fundado en 1977 y en la División de Plata desde hace cuatro temporadas. El cuadro alfarero se presenta con urgencias por su situación —marcha antepenúltimo—, pero también con el impulso anímico del triunfo a domicilio contra el Numancia (0-1). José Bordalas, su técnico, resumió en la previa de la relevancia del partido: “Nos jugamos media temporada”. Si la sentencia del entrenador se traslada a las aspiraciones de ambos equipos, lo que está en juego es evitar la quema. Y nadie como Jona para comandar la escapada.