Jabalcuz disfruta ya de unos esperados nuevos accesos

Alas afueras de la capital se encuentra un barrio más de la ciudad, con un paraje natural de auténtico ensueño al alcance de la mano. Puede parecer el principio de un cuento de hadas, pero es la sencilla realidad de uno de los enclaves tan bellos como desconocidos para la gran mayoría de los jiennenses. Y su cercanía es, ahora, más palpable si cabe, con los nuevos accesos que el pasado jueves fueron inaugurados de forma oficial y que suponen el esperado colofón a una larga y constante reivindicación vecinal. A fuerza de una insistencia fuera de lo normal, los residentes disfrutan desde hace unas semanas de unas infraestructuras que llegaron a convertirse durante años en auténtico caballo de batalla. Gran parte de la “culpa” es de la Plataforma y justo es reconocerlo. Por fin están ahí los accesos, tanto para bien de los vecinos de la zona, como de cualquier ciudadano que quiera acercarse a pasear por alguno de los verdes rincones que allí se esconden y que guardan plantas y árboles con siglos de antigüedad. El presupuesto de las obras ha supuesto una inversión de 1,2 millones de euros y solventa el problema de peligrosidad que se había reivindicado en ocasiones anteriores. El transporte público hacia ese barrio está ya solucionado también, por lo que poco a poco los servicios básicos dejarán de ser el habitual paño de lamentaciones al que tenían acostumbrados a los políticos.
Ahora que el camino está abierto, quizá sea el momento de plantearse la recuperación completa de sus termas y jardines y sacar a la luz el tesoro que se ha ido enterrando con el paso de los años. El antiguo esplendor de Jabalcuz todavía es una de las asignaturas pendientes de la ciudad, una deuda que los sucesivos gobiernos municipales de las últimas legislaturas no han sido capaces o no han querido solventar, quizá debido a una innegable complejidad en muchos aspectos.

    02 may 2009 / 09:39 H.