Un jiennense, al banquillo acusado de pertenecer a un grupo neonazi
Rafael Abolafia / Jaén
La Audiencia de Madrid juzgará en los próximos meses a Francisco José L. P., un vecino de Jaén de 31 años, acusado de formar parte de un grupo neonazi. La Fiscalía le pide cinco años de cárcel por delitos de asociación ilícita y tenencia ilícita de armas. Otras dieciocho personas se sentarán también en el banquillo. Francisco José L. P. fue detenido a finales de abril de 2005 por la Guardia Civil en el marco de la conocida como “operación Espada”. Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado dieron por desarticulada la rama española de una red internacional denominada “Sangre y Honor”, presuntamente vinculada al movimiento “skin head”. El Instituto Armado aseguró, entonces, que Francisco José L. P. era “uno de los cabecillas del grupo. En total, fueron arrestadas 21 personas en Sevilla, Burgos, Zaragoza y Madrid, donde se desarrolló el grueso de la redada. Más de tres años después, los detenidos ya saben a lo que se enfrentan. En concreto, el vecino

La Audiencia de Madrid juzgará en los próximos meses a Francisco José L. P., un vecino de Jaén de 31 años, acusado de formar parte de un grupo neonazi. La Fiscalía le pide cinco años de cárcel por delitos de asociación ilícita y tenencia ilícita de armas. Otras dieciocho personas se sentarán también en el banquillo. Francisco José L. P. fue detenido a finales de abril de 2005 por la Guardia Civil en el marco de la conocida como “operación Espada”. Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado dieron por desarticulada la rama española de una red internacional denominada “Sangre y Honor”, presuntamente vinculada al movimiento “skin head”. El Instituto Armado aseguró, entonces, que Francisco José L. P. era “uno de los cabecillas del grupo. En total, fueron arrestadas 21 personas en Sevilla, Burgos, Zaragoza y Madrid, donde se desarrolló el grueso de la redada. Más de tres años después, los detenidos ya saben a lo que se enfrentan. En concreto, el vecino
de la capital se juega cinco años de cárcel. El fiscal acusa a Francisco José L. P. de un delito de asociación ilícita y otro de tenencia ilícita de armas. ¿Por que? Considera que este jiennense es uno de los miembros fundadores de “Sangre y Honor” en 2002: “Es una organización que se identifica con el nazismo, cuyos afiliados se distinguen por su indumentaria paramilitar y que utilizan símbolos como la cruz céltica”, dice literalmente el Ministerio Público en su escrito de acusación provisional.
El fiscal agrega que la asociación “promueve una doctrina antisemita y realiza de manera activa una exaltación de la ideología neonazi, que incita al odio y a la discriminación contra determinados grupos por razón de su raza, condición, religión o ideología”.
Además, asegura que el grupo está “estructurado jerárquicamente, bajo la dirección de un líder y con varios responsables a nivel territorial”. Según el Ministerio Público, uno de esos dirigentes era, en febrero de 2005, Francisco José L. P., que, presuntamente, estaba al frente del grupo en Jaén.
La Fiscalía sostiene que “Sangre y Honor” se financiaba, entre otras cosas, mediante la venta de todo tipo de parafernalia neonazi y con la celebración de conciertos que, además, “servía para propagar la ideología de la organización”. En este sentido, los grupos musicales que intervenían defendían “la supremacía de la raza blanca e incitan al racismo, la xenofobia y el antisemitismo”, siempre según el escrito de acusación.
Después de uno de esos conciertos, celebrado el 12 de febrero en una discoteca del municipio madrileño de Talamanca del Jarama, la Guardia Civil decidió intervenir. Fueron detenidas 21 personas en distintas provincias españolas. Entre ellos, estaba Francisco José L. P. En el registro de su casa, los agentes encontraron dos pistolas, si bien una de ellas estaba inutilizada. Asimismo, según la Fiscalía, en el ordenador personal de este jiennense se halló “documentación relativa al antisemitismo, la xenofobia y la violencia”.
Este jiennense se sentará en el banquillo de la Audiencia Provincial de Madrid acusado de un delito de asociación ilícita, por el fiscal le reclama tres años de cárcel, y otro de tenencia ilícita de armas, por el que le piden dos años más. En el proceso, también está personado la asociación Movimiento contra la Intoleracia