Israel: "Los que salgan al campo tienen que reventar"
El último partido. Una final. Toda la temporada en juego. En esta dimensión se envuelve el encuentro del sábado ante el Alavés. Ya no queda tiempo ni margen de error. El resultado marcará un año de trabajo y el curso siguiente. Por la trascendencia de los puntos, Israel Jerez, uno de los titulares en los últimos encuentros, hace una reflexión certera. Y la expresa con nitidez: “Los once que estén en el terreno de juego tienen que reventar y darlo todo.
Cualquier jugada debe ser como si fuera la última del mundo”, asegura. “Ganas, ilusión y optimismo no nos faltan. Soy de los que piensan que, si ganamos, nos salvamos seguro, porque no se dará una jornada como la anterior, en la que vencieron todos los rivales directos. Tenemos que ser positivos y confiar en que con 51 puntos estaremos el año que viene en Segunda División. Lo único que podemos hacer es conseguir los tres puntos y esperar que los demás pinchen”, añade.
El granadino habla de la importancia de que La Victoria esté repleta de aficionados, porque entiende que su apoyo será crucial para alcanzar el objetivo, primero ganar y luego esperar una combinación favorable. “A todo jugador le gusta jugar con un campo lleno y que le ayude. Que el día de la Ponferradina se llenara y no lográramos los tres puntos, no quiere decir nada. Otras veces se ha llenado y el equipo lo ha hecho fenomenal. Queremos ver el campo lleno de nuevo. Si el sábado hay 12.000 personas que nos apoyan, es un plus que se notará”, advierte. E introduce un matiz. “El Alavés vendrá con ganas porque se juega mucho. Tiene sus opciones, pero seguro que se pondría en nuestro lugar. Nosotros nos jugamos el descenso en nuestro campo y ante nuestra gente. El estadio estará a rebosar y apretará mucho. Es un aliciente. Juntos lo vamos a conseguir”, agrega.
Ritchie Kitoko, el congoleño de nacionalidad belga, se expresa en términos parecidos a los de Israel Jerez. “Es una final y toca ganar y esperar a lo que hagan los demás. Yo no he hecho cuentas, porque lo único que se me pasa por la cabeza, como al resto de mis compañeros, es conseguir la victoria. Después de lograr los tres puntos, ya miraremos los otros resultados. Si no ganamos, no sirve para nada”, resume. Destaca la trascendencia del partido y matiza que un triunfo es media salvación. “Si el Alavés no se jugara nada, sería mejor, digo yo. Pero no tenemos que pensar ni en eso. Lo que queremos es la victoria y da igual quien venga. Es el partido más importante de la temporada y, si vencemos, tendremos muchas posibilidades de conseguir el objetivo. Lo primero de todo es ganar”, concluye.