Investigación del suceso en el que un varón recibió un disparo

El alcalde del municipio en el que ocurrió el percance, Valentín Merenciano, admite que hay aspectos que todavía no están claros. No obstante confirma que el incidente se produjo en el coto conocido como Cortijo de Arriba, ubicado en la zona denominada Dehesa Carnicera, un área muy rica en especies cinegéticas. Explica que un grupo de personas participaba en una jornada de caza menor mientras, a no excesiva distancia, se celebraba una montería. “No se sabe de dónde ha venido el tiro”, manifiesta. De acuerdo con sus datos, el disparo le afectó al hombro y después le causó una perforación en un pulmón. Ante la relevancia de las lesiones —originadas, según las fuentes, por munición de postas— el varón fue trasladado, por proximidad, hasta el centro de salud de Santisteban del Puerto, desde donde se le derivó hasta el Hospital Médico-Quirúrgico de Jaén. Por su parte, en Ibros se indica que entre los participantes en la salida, además de Antonio P. M., había otro vecino del municipio.
El herido es un hombre muy conocido en el pueblo. Casado y con varios hijos suele trabajar en el campo y en la construcción y es aficionado a la caza. En principio, pese a la gravedad de las lesiones, se encuentra fuera de peligro, aunque tardará tiempo en recuperarse de las lesiones sufridas. Acerca del origen del percance del fin de semana existen numerosos comentarios y rumores en El Condado.
Por su parte, la Comandancia de la Guardia Civil de Jaén declina facilitar información sobre el suceso. Se limita a asegurar que, en este caso, tiene mucha información y que se investigan los hechos, sobre los que se estiman varias hipótesis. No ha trascendido, por ejemplo, si se ha identificado al autor del disparo que causó las lesiones ni si, en caso afirmativo, el Instituto Armado lo ha imputado como presunto autor de las heridas a Antonio P. M.
El paraje en el que aconteció el incidente se caracteriza por su riqueza medioambiental, con la presencia de numerosas especies botánicas y animales. Entre estas últimas en la zona proliferan, además de conejos, liebres y perdices, jabalíes, ciervos, muflones, gamos y otros trofeos de caza mayor. Las monterías son frecuentes en otoño, al igual que la presencia de personas que buscan setas por un área de media montaña con vegetación mediterránea.
Cada año, la práctica cinegética origina percances con daños personales en la provincia. En octubre de 2014, un hombre perdió la vida en Alcalá la Real durante una batida de jabalíes al recibir un disparo accidental. En enero también fue mortal el tiro que impactó en otro cazador en Burunchel (La Iruela).