Inversión del Estado para un nuevo parcheo de la N-322
No está todavía concretado, pero es previsible que la Nacional 322 reciba una inversión de 200.000 euros para reparar un nuevo desprendimiento, a la altura de Iznatoraf. El dinero está incluido en una partida global, de 2,7 millones, aprobada ayer por el Gobierno.

El Consejo de Ministros aprobó, ayer, invertir en obras de emergencia en la provincia de Jaén. La partida prevista supera los 2,7 millones. De esta suma, 1.634.389,08 se destinarán al terraplén de la A-44 socavado por el río Guadalbullón; para la reparación de caminos de servicio en la Autovía del Sur A-4, en Marmolejo, y para el arreglo de deslizamientos y socavones en varios puntos de la N-322, en el término municipal de Iznatoraf, y para subsanar un deslizamiento en la N-432, en el término municipal de Castillo de Locubín. El resto hasta completar la cifra supone invertir 1.117.923,65 euros en obras de reparación del puente sobre el río Guadalquivir de la Autovía A-44, en este caso, en el término de Mengíbar.
Aunque en la web oficial de La Moncloa, no se especifica las cuantías de las diferentes obras que se ejcutarán en esta transitada carretera, recientemente, el subdelegado, Juan Lillo, avanzó al alcalde de Villanueva del Arzobispo, Gabriel Fajardo, que se iban a destinar algo más de 200.000 euros a la reparación de este punto negro de la N-322, situado entre el kilómetro 184 y 185. Muchos de los conductores aseguran sentir “respeto y miedo por si al pasar se hunde la calzada”. Joaquín de la Hoz es uno de ellos. Vive en Villacarrillo y trabaja en Villanueva del Arzobispo y no entiende la pasividad de la Administración, un año después del hundimiento de la vía. Para el alcalde villanovense, es incomprensible que se instalaran señales de tráfico tanto a la salida de Villacarrillo como a la llegada desde Gútar, que llegaron a advertir del corte de carretera. Los avisos están ocultos con plásticos negros. Y si se habla de deterioro de la carretera, al estado del asfalto, agrietado, rehundido y deformado, se unen más hundimientos serios. Uno en el kilómetro 160, al poco de salir de Torreperogil en dirección a Villacarrillo y otro a unos 5 kilómetros más adelante, que lleva más de cuatro años a la espera de inversiones. Por todo esto, no cesan las quejas de colectivos como la plataforma pro autovía, gestada en Villanueva del Arzobispo y a la que le está costando mucho trabajo conseguir autorización para poder manifestarse junto a la propia carretera, tras varios intentos, contestados con negativa desde la Subdelegación del Gobierno.