La parricida confiesa que mató a sus hijos porque no quería verlos sufrir

Rafael Abolafia / Jaén
Ruth B. V., de 37 años, confesó a los agentes que había acabado con la vida de sus dos hijos, Álvaro y Alejandro, de 11 y 3 años, respectivamente. Los asfixió, posiblemente con un cojín que había en la vivienda, porque no quería que verlos sufrir en este mundo, tal y como confirman fuentes cercanas a la investigación.
Poco más ha trascendido de la declaración de la autora confesa del doble crimen, una ama de casa con antecedentes psicológicos por depresión.

    29 sep 2011 / 20:20 H.

    Los agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Comisaría interrogaron a Ruth B. V. en el Módulo Penitenciario del Hospital ayer por la tarde. La mujer permanecía en el recinto sanitario desde la madrugada del viernes, tras pasar por el calabozo de la Comisaría.
    El interrogatorio fue la diligencia final de una investigación que estaba muy clara desde que ocurrieron los hechos y Ruth B. V. se autoinculpó del doble crimen. Las fuentes consultadas explican que estaba “tranquila” cuando relató a los agentes lo que había hecho. Afirmó que había asfixiado a sus hijos, de 3 y 11 años, respectivamente. Y argumentó que lo hizo porque no quería verlos sufrir en este mundo, un lugar que no le gustaba para ellos.
    Al parecer, utilizó algo parecido a un cojín que había en la vivienda para dejar sin aire a los pequeños. De hecho, Ruth entregó esta prenda a los agentes de la Policía Científica, que se la llevaron de la vivienda familiar, ubicada en el número 2 de la calle Alcalde Cancio Uribe, donde se produjo el parricidio. No obstante, las causas exactas de la muerte de los niños deben ser confirmadas por la autopsia, que ayer mismo fue practicada por los forenses del Instituto de Medicina Legal de Jaén. Los análisis también deberán confirmar si Ruth B. V. facilitó algún tipo de medicamento o calmante a los niños.
    En un primer momento, el portavoz oficial de la Comisaría confirmó a los medios que la madre había ahogado a los dos niños en la bañera. Fue la hipótesis que se barajó en los primeros momentos de la investigación. No obstante, después se comprobó que Ruth B. V., presuntamente, los asfixió, tal y como ella misma confesó. Según dijo, mató al mayor, Álvaro, de 11 años, en su propio dormitorio. Al pequeño Alejandro, de tan solo 3, lo asfixió en el cuarto de baño y, después, lo trasladó a su cama.
    Después de darles muerte, la parricida telefoneó a un familiar para decirle lo que había hecho. La pariente se personó en la vivienda y vio la tragedia. Avisó al Servicio de Emergencias de Andalucía 112, alertando de que la mujer amenazaba con matar a sus hijos. Alrededor de las siete y media de la tarde, varias patrullas de la Policía Nacional y de la Policía Local se personaron en el domicilio de La Alcantarilla. Cuando entraron en la vivienda, encontraron los dos cadáveres. Ambos estaban acostados en la cama. Los médicos del 061 intentaron reanimarlos. Durante más de veinte minutos les realizaron maniobras de reanimación. Todo fue inútil. Ambos estaban muertos.
    En ese intervalo de tiempo, el padre de los pequeños, Ángel Puertollano, llegó a su piso a la carrera. Ya lo habían avisado de que algo grave estaba ocurriendo en su casa. Dejó los ejercicios de rehabilitación que hacía a diario tras sufrir un accidente que le produjo un grave lesión en una pierna y corrió hasta su casa. Los vecinos lo vieron entrar a toda prisa, gritando que su mujer le había hecho algo malo a sus hijos. Se descarta que fuera su propio hijo Álvaro el que lo telefoneó, tal y como apuntó el portavoz de la Policía Nacional en un primer momento. Desde entonces, Ángel está en manos de los psicólogos.
    Fuentes del entorno familiar explican que Ruth había sido “una madre ejemplar”. “Siempre estaba muy pendiente de sus hijos, al igual que el padre”, explicaron los vecinos del matrimonio poco después de que ocurrieran los hechos. Relatan que los llevaba a diario al colegio Andrés de Vandelvira, donde Alejandro cursaba segundo de Educación Infantil y Álvaro, sexto de Primaria. Además, solía salir a pasear con ellos por las tardes por el barrio de La Alcantarilla: “Nunca había dado ni un problema”, remarcan. La mujer estuvo en tratamiento por depresión poco después de nacer su hijo pequeño, tal y como explicaron fuentes familiares. Sin embargo, ya había recibido el alta.
    Se espera que la mujer pase a disposición judicial hoy por la mañana. Policialmente, es un caso cerrado. Las diligencias están terminadas y el juez del caso, el magistrado Fernando Moral, ya está informado. No obstante, su señoría decidió posponer la declaración de Ruth B. V. En la comparecencia de hoy, la Justicia tendrá que decidir qué hace con la autora confesa del doble infanticidio. Por la gravedad de los hechos, se da por seguro su ingreso en prisión preventiva.


    30.09.2011. Ingresada en el módulo penitenciario del Hospital la mujer acusada de matar a sus dos hijos
    La mujer acusada de matar a sus dos hijos, de tres y once años de  edad, en la capital jiennense se encuentra ingresada en el módulo  penitenciario del Complejo Hospitalario de Jaén a la espera de pasar  a disposición judicial, según ha informado a Europa Press el Cuerpo  Nacional de Policía.De esta forma, el ingreso se ha producido inmediatamente después  de que la acusada abandonara su domicilio de la calle Alcalde Cancio  Uribe en la noche de este jueves, adonde presuntamente había  provocado horas antes el fallecimiento de sus dos vástagos, propósito  sobre el que había alertado a un familiar en torno a las 19,00  horas.
     

    El Ayuntamiento ha izado las banderas de  la Casa Consistorial a media asta ante el hecho "luctuoso" de la  muerte de los dos menores. En declaraciones a los periodistas, previamente al acto de  apertura del Congreso de la Asociación de Jefes
    La consejera para la Igualdad y Bienestar Social de la Junta de  Andalucía, Micaela Navarro, ha condenado este viernes los dos sucesos  en los que una madre ha acabado supuestamente con la vida de sus dos  hijos, de tres y once años de edad, en la capital, así como el suceso  en el que un varón de 41 años de edad ha provocado la muerte de su  madre en la localidad jiennense de Linares.


    29.09.2011. Una madre mata a sus dos hijos

    Una terrible tragedia sacudió ayer por la tarde el barrio de La Alcantarilla. Una mujer, de unos 40 años, mató a sus dos hijos asfixiándolos, según confirma ahora un portavoz oficial de la Comisaría. Sin embargo, anoche, fuentes oficiales de la Policía dijeron que los ahogó en la bañera. La parricida, que hace unos años estuvo en tratamiento por depresión, ha pasado la noche en el calabozo. El crimen se produjo alrededor de las siete de la tarde en el domicilio familiar, ubicado en segundo piso del número 2 de la calle Alcalde Cancio Uribe, en La Alcantarilla. La primera hipótesis que baraja la Policía es que la madre, de nombre Ruth y de unos 40 años, asfixió a los niños. Al parecer, los cuerpos de los pequeños estaban en la bañera de la vivienda. Las víctimas son Álvaro, de 11 años, y Alejandro, de tan solo 3, ambos alumnos del colegio Andrés de Vandelvira.
    Al parecer, la parricida y los niños estaban solos en el piso. El padre, que trabaja en una empresa de mantenimiento de ascensores, sufría un problema de salud en una pierna y ayer por la tarde fue a rehabilitación. Según apuntan las investigaciones, su hijo mayor, Álvaro, lo telefoneó a media tarde, angustiado. Lo avisó de que algo estaba pasando con la madre, que le había hecho daño a su hermano Alejandro. Así lo confirman algunos de los muchos vecinos que vieron cómo el progenitor llegó corriendo a su casa poco antes de las siete y cuarto de la tarde: “Iba a la carrera, gritando algo de su mujer y de los niños”, explica uno de los residentes de la calle, al que la Policía no dejaba entrar en su vivienda. Cuando el padre de los pequeños entró en su piso, comprobó que su mujer había matado a los pequeños.
    Inmediatamente, telefoneó a familiares, que alertaron de lo ocurrido al Servicio de Emergencias de Andalucía 112. A la calle Alcalde Cancio Uribe se desplazaron rápidamente varias patrullas de la Policía Nacional, equipos de la Científica y los investigadores de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta. También acudieron los servicios sanitarios. Los médicos tan solo pudieron certificar la muerte de los dos niños.
    La mujer fue detenida por la Policía. Pasadas las nueve y cuarto de la noche, los agentes la introdujeron en un coche y la trasladaron hasta la Comisaría. Mientras, su marido permanecía en la vivienda, en compañía de otros familiares. Salió casi a las once de la noche, tres cuartos de hora después de que su señoría, el juez Fernando Moral, ordenara el levantamiento de los cadáveres, que fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal de Jaén, donde hoy se les realizará la autopsia para determinar las causas exactas del fallecimiento.
    Antonio Yera, tío del padre de los pequeños, no se explicaba lo que había ocurrido: “Todavía estamos en estado de shock. Imagínate cómo está mi sobrino”, dijo después de consolarlo en el propio domicilio. Antes, ya habían estado con él los psicólogos de la Delegación de Salud, que también atendieron a otros parientes.
    El matrimonio residía en ese piso desde que se casaron, hace casi dos décadas, según explican vecinos. “Era una familia normal y corriente. Nunca habían dado un problema. Todo lo contrario, gente muy integrada en el barrio, que salían juntos todos los domingos, se iban de vacaciones a la playa y a la nieve”, explica Pepi, una mujer amiga de la presunta parricida. “Eran dos niños guapísimos, maravillosos”, añade, ya entre lágrimas.
    La madre estuvo en tratamiento psicológico tras sufrir una depresión justo después de nacer su hijo pequeño, tal y como confirma Antonio Yera, el tío del padre. “Estaba en manos de los médicos por una depresión postparto, pero ya estaba bien, o al menos eso creíamos”, agrega este familiar.
    La mujer permanecerá hoy en dependencias de la Comisaría a la espera de concluir la investigación. Está previsto que pase a disposición judicial en las próximas horas. Rafael Abolafia/Jaén