Impuesto sobre el patrimonio

Menos mal que han aprobado finalmente el impuesto sobre el patrimonio! Ya está bien que la crisis la estuviéramos aguantando sólo unos muchos, a costa de unos pocos. Es de justicia que si toca 'vacas flacas', las consecuencias las llevemos entre todos, tengamos más o tengamos menos.

    26 sep 2011 / 09:11 H.

    Y es que por más vueltas que le doy, yo no sé aún en qué he colaborado, en qué me he equivocado, en qué he despilfarrado, para haber llegado a este momento económico. Y como yo, aunque funcionario, creo que una mayoría de españoles. En su momento, fui europeísta, pero no para esto. No me pidieron opinión para ver si quería el euro o no. Y desde que se nos impuso la “moneda única”, yo no veo nada más que puedo comprar menos cosas porque están más caras, paro a mi alrededor, y últimamente, la que nos está cayendo encima —acabo de leer que las bolsas vuelven a hundirse—.  Es más, también soy de los que piensa que no se tenía que haber suprimido ese impuesto —con carácter permanente desde 1991—. Fue un error del gobierno socialista. Y si se suprimió porque, según ellos, gravaba a las clases medias, se reforma y punto. Más da qué pensar, sobre los afectados por el citado impuesto. Creo que por una sencilla razón de justicia social y equilibrio recaudatorio: quien más tiene, que pague más, y más en tiempos de crisis, es un acierto su resurrección. Y debería ser así para siempre, cosa que digo porque parece ser que este impuesto se recaudará en 2012 y 2013, con cargo a los ejercicios de 2011 y 2012. ¿Y por qué no dejarlo “per seculam, seculorum”? ¿Es que quizá, para esas fechas ya hayamos salido del agujero en el que nos encontramos? ¡Ojalá sea así!. Y si ya hemos salido, pues se ahorra, se guarda y para que no caiga definitivamente el llamado estado del bienestar. Y ahora que escribo ahorro, me vienen a la memoria, las palabras del que ya se ve y lo ven, nuevo presidente del gobierno, Mariano Rajoy. Lo ha criticado porque asegura que penaliza el ahorro. Y con la situación que tenemos, permítanme mi atrevimiento, ¿quién de ustedes puede ahorrar? Porque a mí se me ha olvidado ya conjugar este verbo. Algunos de nuestros “padres de la patria”, disciplinados ellos, aunque lo han criticado, se han abstenido y no han impedido su aprobación. Lo cual, me parece bien si entienden que es por un bien para nuestro país. Pues de ser así, que se dejen de monsergas y visiones partidistas y negativas y lo digan claramente.  De nuevo el doble juego instalado en una actividad —la Política— en la que debería reinar la honestidad, la claridad y la honradez. No me extrañaría que cuando tengan en sus manos las riendas de nuestra España, vuelvan a quitarlo y sigamos penando en este “valle de lágrimas”, mientras unos pocos se “jartan” y jactan de su poderío  y pertenencias.
    Francisco José Campaña es maestro