¿Dónde estabas entonces?

Respeto el Estado de Derecho. Admiro la Democracia. Creo en los poderes. Pienso que tanto monta, monta tanto, el empresario Isabel como el currito Fernando, y tan necesarios son el uno al otro como el otro al uno. Y como el que paga manda, el que cobra obedece, que dicen por ahí.

    15 mar 2012 / 11:38 H.

    Además, si el fuerte abusa del débil, aparece mi primo el de tal y lo defiende. A ultranza; pero éste no debería pegarle al fuerte, ya que lo puede hacer débil. Ya lo advertí hace tiempo, que había un come-come, una sensación recóndita y subliminal, un deseo subrepticio de que la derecha española llegara al poder y desempolvar las rojas pancartas y las siglas dobles para tirarse a la calle. Y aquí están ya. El mileralismo ya llegó. Porque bendita defensa del masacrado trabajador y de sus derechos, ¿ahora? Quizás sea la antesala a la movilización de la creación de empleo, y ya vamos anticipando como velar por el bienestar del posible y futuro empleado, si es que algún día lo haya, o tal vez solo sea un movimiento político ya no tan encubierto, así como más descarado. O probablemente tenga que ver con la cercanía a ese proceso electoral de suma importancia para la Nación española, porque no olvidemos que somos la comunidad autónoma que más población, votos e impuestos aportamos a España. Pese a que un concreto grupo de separatistas norteños crean que somos carne de bar y subvención. El hecho es que necesitamos de los sindicatos para que el empresario no produzca la represión y opresión del proletario. Hoy. Mañana. Y, por supuesto, no deberían olvidar que, también ayer. Francisco J. Peinado es profesor de Formación Vial