Huelga en Linares-Baeza
La Estación de Linares-Baeza fue de nuevo, ayer, escenario de las protestas de los trabajadores. En este caso, a través de la huelga de 46 horas que se prolongará hasta hoy, celebrada a nivel nacional en todas las provincias, y que hicieron coincidir con la operación salida más importante de la temporada estival.
La Estación de Linares-Baeza fue de nuevo, ayer, escenario de las protestas de los trabajadores. En este caso, a través de la huelga de 46 horas que se prolongará hasta hoy, celebrada a nivel nacional en todas las provincias, y que hicieron coincidir con la operación salida más importante de la temporada estival.

“Nos encontramos en una jornada de protesta, no solo de huelga sino también de concentraciones y movilizaciones, en defensa del empleo ferroviario”, explicó el secretario provincial del sector ferroviario de CC OO en Jaén, Manuel Núñez, que junto a una treintena de empleados se concentró a las puertas de la estación que durante años ha sido un importante nudo de comunicaciones. Son varios los meses de negociación que llevan con las empresas que se encuentran al frente del sector tras la división de Renfe y Adif “porque quieren reducir la plantilla de una manera drástica y aplicando el artículo 41 a marchas forzadas”. El último planteamiento, puntualizó, es que 415 trabajadores “sobraban” en todo el país, en el caso de la provincia 5 que desempeñan su función en la Estación de Linares-Baeza. En concreto, en el servicio de estacionamiento de contenedores.
De hecho, afirmó que ya se aplica en la provincia el “traslado forzoso” de estos empleados durante tres meses a Barcelona y al País Vasco. “La media de edad de todos los que estamos aquí es de 50 años, con lo que cualquiera se puede imaginar lo que supone para estas personas, con cargas familiares, viviendas, hipotecas y demás, el hecho de que nos lleven a Madrid o Barcelona. Es como un desahucio”, aseveró. Así las cosas, lo que demandan es que se negocien las recolocaciones y los cambios de servicio como se ha hecho hasta el momento “y que no se cierren en banda”.
“Además intentan implantar modificaciones en las condiciones de trabajo sin negociación alguna, la mayoría de este personal”, lamentó Núñez. En este sentido, reconoció que hasta la fecha se habían dado pautas de negociación “y de hecho se han alcanzado acuerdos como el de garantías tras la división de Renfe y Adif, donde se garantizaba sobre todo el derecho de los trabajadores y laborales que tenían de las empresas anteriores”. En esta misma línea se expresó Juan Campos, secretario del sindicato de Circulación Ferroviaria: “Cuando están por la labor de negociar en igualdad de condiciones se ven los buenos resultados, y muestra de ello es el ERE aprobado o el último convenio que se firmó. Lo que no estamos por la labor ni vamos a consentir son las imposiciones para cercernar los derechos de la gente más desprotegida”.
En esta línea, apuntó a que existen otras alternativas, entre las que se encuentra el hecho de que los traslados sean voluntarios, “pero esto de que sean a la carta, que ellos decidan los que quieren que se vayan o las provincias... es cierto que hay una descompensación de plantillas y se puede estudiar, y para eso estamos los sindicatos”.
Medidas que, en su opinión, y junto a la paulatina eliminación de circulaciones como la acometida el año pasado, llevan a la despoblación de las estaciones más pequeñas. “Eso es lo que ha pasado, por ejemplo, con la cuestión de vender los billetes a través de Internet. Y no es que estemos en contra de las nuevas tecnologías, pero no todo el mundo tiene acceso aún ni sabe utilizarlo, y a ello se suma una población cada vez mayor de edad. A muchos les gusta acercarse a la estación”, manifestó Juan Campos.