Hogar para los que no tienen
La calle, el mismo lugar donde duermen unas 40 personas cada noche porque no tienen otro sitio al que ir, se convirtió ayer en un escenario de denuncia de una dramática situación. “Es intolerable que siga habiendo personas sin hogar”, explicó el presidente de Cáritas de Jaén, Rafael López-Sidro, en el acto que sirvió para concienciar a la ciudadanía jiennense de un problema que para muchos es invisible. Por ello, la ONG organizó una movilización espontánea, también llamada “flashmob”, en el centro de la capital jiennense para poner de manifiesto la situación de las personas que no tienen un hogar. Más de 150 personas participaron en un acto cargado de simbolismo y en el que se construyó una casa de cartón, que representa la esperanza de que se puede acabar con este problema con la colaboración de todos. De hecho, el lema de la campaña de Cáritas resume a la perfección el espíritu de implicación social: “Porque es posible. Nadie sin hogar”.
La organización denuncia que esta realidad del ‘sinhogarismo’ se ha extendido “fruto de las desigualdades sociales y de un amalgama complejo de factores que hacen difícil pararla”. Cáritas ha recordado que, en España, 40.000 personas tienen dificultades para acceder y mantener una vivienda digna, estable y adecuada”. Más de 40 duermen al raso durante todo el año en las calles de la capital, tal y como confirmó Álvaro Montejo, uno de los voluntarios de la ONG. Cáritas atiende a decenas de personas en el Hogar de Santa Clara. Hay que recordar que, la semana pasada, se puso en marcha el dispositivo de emergencia para la atención a los temporeros que llegan a la campaña de la aceituna y en el que participan unos ochenta voluntarios que colaboran en el dispositivo de emergencia de atención al inmigrante.
Al respecto, Rafael López-Sidro asegura que Cáritas estará vigilante para que no haya plazas vacías en los albergues para temporeros que llegan a la provincia en busca de un tajo si hay personas que demandan ocuparlas y ello aunque hubieran superado los tres días que, como máximo, pueden estar en cada uno. El responsable de la ONG considera que la afluencia de trabajadores será similar a la de otro años, si bien reconoció que hay “un poquito más de gente” que en la pasada campaña, “algo previsible por aquello de que la cosecha es mejor. Estima que se desplazarán hasta la provincia unos 4.000 temporeros: “Es una cifra de personas cuya atención podemos asumir”, concluyó.