Historias de amor entre olivos
Diana Sánchez /Jaén
El mundo aceitero es el telón de fondo de la serie Gavilanes que emite Antena3 los lunes. Una versión a la española de la colombiana Pasión de Gavilanes en la que los protagonistas trabajan rodeados de olivos en una almazara típica de la zona de Tarragona, donde también tiene fuerza esta industria.

El mundo aceitero es el telón de fondo de la serie Gavilanes que emite Antena3 los lunes. Una versión a la española de la colombiana Pasión de Gavilanes en la que los protagonistas trabajan rodeados de olivos en una almazara típica de la zona de Tarragona, donde también tiene fuerza esta industria.
Con una empresa aceitera como escenario principal los hermanos Reyes se introducen en la vida de la familia Elizondo y en las casas de los jienneneses para hacerles ver que en una almazara de la Loma, de la Campiña o de Mágina podría contarse una historia tan pasional y emocionante como la de Gavilanes. Un serial que emite Antena3 los lunes basado en el éxito que marcó la telenovela colombiana Pasión de Gavilanes y original de Julio Jiménez.
De hecho, los protagonistas toman los mismos nombres y siguen tramas parecidas sólo que, en este caso, la familia de las “niñas ricas”, los Elizondo es de un empresario dedicado al fruto rey de la provincia jiennense, el aceite. De esta forma, los capítulos cuentan los amores, traiciones, arrebatos y alegrías de las distintas relaciones, pero ambientadas en La Hacienda. Un negocio que sufre una crisis económica, debido a su falta de liquidez y en la que uno de sus principales proveedores decide vender su producción a otro cliente, casualmente a un grupo italiano. Así, entre campos de olivos o cerca de una almazara que rebosa picuales, los personajes viven diferentes historias entrelazadas, siguiendo el esquema clásico de una telenovela.
Dirigidos por Jesús Font, los protagonista son Claudia Bassols y Rodolfo Sancho, en los papeles de Norma Elizondo y Juan Reyes, respectivamente. Desde el primer capítulo —ayer se emitió el cuarto— los diferentes personajes se conocen desde un punto de inflexión que se marcó en el comienzo: el accidente de tráfico de Bernardo Elizondo y Lidia Reyes. Un hecho que abrirá las puertas de la Hacienda a los hermanos en busca de las pistas que les lleven a la verdad sobre la muerte de su hermana. Una apuesta televisiva rodada en diferentes puntos de Cataluña, como en las fincas de olivos de Tarragona y que recuerdan a los mares verdes de la provincia de Jaén.