Herido un trabajador al caer desde cuatro metros de altura
Un vecino de la capital, fontanero de profesión, permanece ingresado en el Hospital Neurotraumatológico de la capital después de sufrir un aparatoso accidente laboral. El hombre, de unos 30 años, se precipitó desde una altura de cuatro metros cuando manipulaba un aparato de aire acondicionado en una vivienda de la calle Agustina de Aragón, en la zona de La Alameda de Adolfo Suárez. Cayó en una especie de patio de luces del inmueble y, debido al fuerte golpe que sufrió en la espalda, apenas podía moverse. Por ello, tuvieron que intervenir los Bomberos, que se emplearon a fondo para rescatarlo. El lugar en el que el trabajador quedó atrapado es muy estrecho, por lo que era muy difícil acceder. Fue necesario utilizar una camilla especial para inmovilizar y estabilizar el cuerpo, y poder sacarlo en posición vertical.
Los hechos se produjeron alrededor de las diez de la mañana. Un vecino alertó al Servicio de Urgencias 061 de que un hombre estaba malherido tras caer desde una escalera al vacío. Algunos vecinos de la zona explican que, al parecer, pisó un ladrillo, que se desprendió y que hizo que se precipitara. El trabajador no llevaba ningún tipo de arnés de seguridad. Cuando los sanitarios llegaron al lugar, comprobaron que no podían atender al hombre, pues era prácticamente imposible poder llegar hasta donde estaba el cuerpo. Así que fue necesario avisar a los Bomberos, que llegaron a la zona en pocos minutos. El rescate fue muy dificultoso y complejo, por lo reducido del espacio en el que estaba el hombre y porque era fundamental sacarlo con los mínimos movimientos posibles, en previsión de que pudiera tener alguna lesión medular. Durante más de media hora, los Bomberos trabajaron en las labores de rescate que, finalmente, culminaron con éxito.
El trabajador, que no perdió la conciencia en ningún momento, fue trasladado en la ambulancia del 061 al Hospital Neurotraumatológico. Lo acompañaron varios familiares que acudieron al lugar de los hechos. Fuentes sanitarias confirman que el hombre sufre un fuerte golpe en la zona lumbar. Permanece ingresado a la espera de la realización de varias pruebas radiológicas para determinar el alcance de las lesiones. Está estable y su estado es reservado hasta que los médicos puedan afinar el diagnóstico.
El protocolo que se sigue en estos casos es que se dé cuenta de lo ocurrido a la Inspección de Trabajo y a la Delegación Provincial de Empleo, organismos que son los encargados de investigar este accidente laboral.