Hay que ser más positivos

El pasado domingo, en el Dominical de Diario JAEN, aparece un pequeño reportaje de David J. Pollay, neoyorquino, licenciado en Economía y director de la Asociación Internacional de Psicología Positiva. Su tarea principal es ayudar a los demás a encontrar su misión y desarrollarla, sorteando las fuerzas constantes de negatividad; y todo se le ocurrió cuando vio a un taxista responder con una sonrisa a unos insultos.

    25 ene 2012 / 10:36 H.

    Ese taxista le dijo que “hay mucha gente que va por la vida acumulando rabia y frustración, y está esperando a la mínima ocasión para verter esa suciedad. Y ya que esto es así, lo fundamental es que no te amarguen la vida”. A poco que miremos a nuestros alrededor, nos damos cuenta de la cantidad de mensajes negativos que podemos recibir al día; pero también, si miramos un poco mejor, quizás con los ojos del corazón, nos daremos cuenta de la cantidad de mensajes positivos que nos rodean. La felicidad está reñida con la negatividad, por ello nos tenemos que esforzar en ser positivos. Esto es fácil decirlo pero difícil de conseguir. Sin embargo, cuando existen personas que nos ayudan a “deshacernos de esa basura emocional” que nos impide ver lo positivo de la vida, es porque, sin duda, se puede conseguir. Y con este mensaje me quedo: dejar pasar los mensajes negativos que sólo consiguen hacerme daño, y trabajar para ser una persona más positiva, “centrarme en las cosas correctas de la vida y desarrollar hábitos que me hagan más feliz tanto a mí como a quienes me rodean”.
    Miguel Lechuga es auxiliar administrativo